Viajar con nuestros hijos puede convertirse en una experiencia muy especial de la que obtener bonitos recuerdos. Para conseguir que el viaje sea todo un éxito desde el principio, deberemos atender unos pequeños consejos que harán mucho más cómodo nuestro recorrido.
Elegir la ropa más adecuada ayudará tanto a grandes como a pequeños a disfrutar con más comodidad del viaje, sobre todo en verano, con lo que evitaremos un calor innecesario en el habitáculo durante el recorrido.
Esta recomendación se hace aún más imprescindible en el caso de los bebés. No olvidemos que al ir sentados en sus sillitas especiales de viaje se van a ver rodeados de tejido extra, por lo que su ropa más que la cualquier otro pasajero debe ser lo más cómoda y ligera posible. El algodón y el lino son los tejidos más adecuados para estos casos, ya que son suaves y transpiran bien, haciendo más sencillo que los niños aguanten tranquilos todo el viaje.
Otro de los detalles que no debemos dejar de lado es el de la temperatura de nuestro vehículo. El aire acondicionado no debe exceder los 22º, de este modo conseguiremos disfrutar del recorrido y evitaremos posibles resfriados. Con este mismo fin, tendríamos que llevar siempre con nosotros una pequeña manta para arroparles en los casos en que sientan algo de frio.
Aunque vayan sentados durante el viaje en coche, un calzado adecuado es esencial. Se trata de niños en pleno crecimiento, por lo que los zapatos deben ser cómodos y de su talla, garantizando una adecuada posición del pie. Deberemos asegurarnos de que las zapatillas tengan:
– Longitud y ancho correctos
– El tobillo esté bien sujeto para evitar que se les pueda torcer el pie
– El talón quede en su sitio, para eliminar rozaduras
Si atendemos a estos pequeños consejos, nuestros hijos disfrutarán de las vacaciones desde el inicio del viaje en coche, convirtiendo la experiencia del viaje en todo un aprendizaje.
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