Ya lo dice el título de post: seguimos de preparativos!
Llegados a este punto, hay cosas que no podemos postponer más, como tener preparada la ropa que se pondrá el bebé en sus primeras semanas o las mantitas y arrullos con los que tendremos que envolverlo. Le toca venir a este mundo en época de frío, así que es nuestra responsabilidad abrigarlo bien.
Ayer antes de cenar, que es el único momento que tenemos libre, estuvimos lavando la ropa de recién nacido que tenemos en casa. A mí nunca se me habría ocurrido que era necesario hacerlo, pero hablando con otras madres recientes, todas habían lavado todo antes de que el bebé lo utilizase. Al final, después de muchas dudas y de tener en cuenta que algunos de los pijamas de batalla los hemos comprado en Primark, decidí seguir el consejo: creo que una dermatitis o algo similar es lo útlimo que necesita un recién nacido, así que, para evitar males mayores, lavado está.
Por otro lado, aún tenemos muchas cosas pendientes. La realidad es que esto de ser padre y madre trabajadores no es la situación ideal para preparar la llegada de un bebé, lo reconozco. Me encantaría tener más tiempo para prepararlo todo con calma, y además de no tener tiempo está el famoso: “tienes que estar relajada para que el peque esté relajado y cuando nazca sea tranquilo.”
Me parece una idea genial, en la teoría, pero, en la práctica, cuando tienes tantas cosas al día de las que estar pendientes, esto es muy complicado, con lo cual, a todo lo que tienes que hacer tienes que sumar el: “Sí, hazlo todo pero sin estresarte”. Algunos días es misión imposible, como me imagino que muchas entendéis.
Por no quejarme demasiado, os cuento también las cosas buenas que tiene esto de tener mil frentes abiertos, entre ellos este blog. Algunas marcas de cosas preciosas me han enviado cosas para el bebé que me encantan, como esta mantita de Bonnie Baby, una tienda online inglesa de la que me compraría todo. Encima tienen un packaging ideal, cosa que no sé si es buena o mala, porque ahora no quiero tirar la preciosa caja en la que venía la manta. Ya sabéis, si queréis hacerme un regalo, no me importa que sea de Bonnie Baby.
embarazomaternidad