Una vez proclamado Rey, Felipe VI tiene ante sí un buen número de retos que afrontar. Uno de ellos es el de llevar el nombre y la imagen de España por el mundo. No es para él una tarea nueva. Lo ha hecho en innumerables ocasiones como Príncipe de Asturias y de una manera muy satisfactoria. Ahora lo va a hacer como jefe del Estado y todo apunta que el Vaticano será su primer destino. Se trata de una Monarquía y de un Rey católico y, aunque no ha habido en su proclamación ninguna ceremonia religiosa por aquello de que España es un Estado aconfesional, resulta lógico que mantenga la tradición de los Monarcas españoles de cumplimentar al Sumo Pontífice.
Lo hará junto con su esposa, Doña Letizia, quien en esta ocasión podrá utilizar el privilegio de las reinas católicas de vestir de blanco ante el Papa. Ambos ya conocen a Francisco, porque representaron a España en la misa de inicio de su Pontificado, y volverán a invitarle a que viaje a nuestro país el año próximo.
Tras ese desplazamiento es previsible que, junto con otras actividades, el mes de julio lo dediquen los nuevos Reyes a visitar los países vecinos: Marruecos, Francia y Portugal. El viaje a Marruecos puede tener lugar pronto y es siempre especialmente significativo, teniendo en cuenta las estrechas relaciones entre la Monarquía española y el Reino alauita.
Para un poco más tarde pueden quedar los desplazamientos a Francia -a donde no ha podido finalmente viajar Don Juan Carlos, que tenía pendiente desde hace tiempo una visita- y Portugal, un país muy cercano y muy ligado a la Familia Real española, desde que Don Juan de Borbón fijara en Estoril su residencia durante el franquismo.
El 4 de agosto, Felipe VI podría viajar a Lieja respondiendo a una invitación de Felipe, rey de los belgas, para asistir a los actos conmemorativos del centenario de la Primera Guerra Mundial.
Para la segunda quincena de septiembre quedará su puesta de largo a nivel multilateral, con su primer discurso ante la Asamblea General de la ONU, en Nueva York. Allí coincidirá con diversos mandatarios, entre ellos con el presidente de Estados Unidos, Barack Obama.
La otra gran cita que ya tiene en su agenda para este año es la Cumbre Iberoamericana de Veracruz, en México, que será la primera a la que asista como Rey. Será los días 8 y 9 de diciembre y prácticamente todos los presidentes que asistirán conocen a Don Felipe porque, como Príncipe de Asturias, ha asistido a sus tomas de posesión.
Felipe VI