ABC
| Registro
ABCABC de SevillaLa Voz de CádizABC
Blogs Madre no hay más que una por Gema Lendoiro

Cuando te gusta el colegio de tus hijos

Gema Lendoiro el

La verdad que hacía mucho que no hablaba de cosas personales de mis hijas en este blog y eso que se supone que es un blog de madre que cuenta cosas de sus hijas. Al final la actualidad me come y siempre opto por hablar de temas más generales y que nos afectan a las mujeres que somos madres y a las mujeres en general.

Enfilamos el fin de curso. Doña Tecla termina MS (moyenne section) y Mofletes Prietos TPS (toute petit section) O, lo que es lo mismo, segundo de infantil y el previo a primero de infantil o guardería que no escuela infantil. Con Doña Tecla los avances este año han sido espectaculares. Entiende perfectamente el francés pero (siempre hay un pero) no lo habla. Lógico si tenemos en cuenta que nosotros no hablamos francés. Así que estuvimos ligeramente preocupados y mirando, por indicación del colegio, ver la posibilidad de tener una au pair externa que venga un par de día a jugar con ella a casa en vacaciones y que le hable única y exclusivamente en francés. Para que ella arranque con frases.

 

La hemos encontrado, la hija de unos amigos y en breve comenzaremos. Y cuál es nuestra sorpresa que, justamente ayer, Doña Tecla tuvo que hacer el ejercicio en clase llamado Quoi de neuf? (¿qué hay de nuevo?) consistente en llevar una cartulina con fotos de ella y de algo que le guste mucho y explicar delante de su clase la historia. Obviamente escogió hablar de los caballos y fue facilísimo encontrar fotos de ella con caballos desde que tiene 14 meses porque, creo recordar, fue a partir de ahí cuando demostró la pasión que tiene hacia estos animales.

El caso es que el sábado fuimos con ella a comprar la cartulina, los lápices y a imprimir las fotos. En casa decidimos cuáles recortaríamos y pegaríamos y en cada foto puse la leyenda de lo que significa teniendo en cuenta que mi hija no sabe leer (va a cumplir cinco años pero en el sistema francés no se les enseña a leer hasta los seis que es cuando se supone que ya saben hablar bien) Estuvimos toda la tarde practicando, su padre y yo (y of course Mofletes Prietos) le servimos de público para que nos contara mientras que entre mi marido y yo la animábamos a construir las frases. Doña Tecla es una mezcla de prudencia y timidez no apta para madres impacientes como yo. ¡Menudo ejercicio de esperarme tengo que hace cada vez que me cuenta algo!

 

Y la sorpresa fue que, no sólo lo hizo genial en español, sino que la profesora nos contó que también se arrancó a decir algunas cosas en francés dejándola sorprendida con la cantidad de vocabulario que tiene. Hasta ahora sólo la había escuchado balbucear algunas palabras. Para que se hagan una idea mi hija es la típica que cuando está fuera de su casa con los adultos habla pues como medio en bajito, moviéndose en forma de balanceo y como pidiendo disculpas. Vamos la típica niña tímida y prudente que se muere de vergüenza. Pero no, ayer superó su vergüenza y, por lo visto lo hizo genial. ¡Cómo me alegré!

No voy a mentirles y les confesaré que a veces me he sentido agobiada porque “someterla” a tres idiomas tiene una consecuencia directa y es que tardan en hablar. Además del francés y español, también tiene clase de inglés en el colegio como actividad extraescolar.  Lo que a veces trae consigo que la niña te diga que quiere comer una apple o mezclas con francés que yo no entiendo y a veces me desespero. De hecho, para entender qué significaba quoi de neuf, tuve que recurrir al grupo de madres de whatsapp del colegio porque ¡no sabía de qué me hablaba! ¡Y encima se cabrea conmigo porque no sé de qué me habla! A veces eso me pasa y lo que te rondaré morena.

 

 

En cuanto a Mofletes Prietos, que lleva desde enero en el cole y que en noviembre cumplirá 3 años, me consta que también entiende bastante bien las órdenes sencillas del día a día de la clase en francés. Ella es completamente diferente a su hermana y las recomendaciones de sus profesoras en un futuro serán, me temo, por otros lados. Es lo que tiene ser tan independiente y mandona. Eso sí, a simpática no le gana nadie. ¿Qué digo mandona? En realidad lo que pasa es que una niña muy despierta y muy viva, que no refrena sus impulsos, que tiene energía desbordante, que va por la calle saludando a todo el mundo y preguntando ¿qué tal estás? y a la que no le gusta que le digan lo que tiene que hacer. Claro, en clase tiene que seguir unas rutinas y eso parece que ya lo tenemos solucionado. En el tema del lenguaje y aprendizaje es muy pronto para decir o pensar nada. Ella simplemente va al cole a jugar con sus amigos y a aprender juegos y canciones. Nada más. Y nada menos.

 

 

Cada vez me gusta más este sistema educativo francés, tan empeñado en respetar la individualidad de cada niño, tan empeñado en personalizar la enseñanza y con unos profesores que están tan entregados a su vocación. El hecho de no enseñarles a leer, por ejemplo, es un ejemplo de lo que para mí es hacer las cosas con cabeza. ¿Cómo se puede enseñar a un niño a leer si no sabe hablar bien? Es de cajón. ¿Recuerdan ustedes cómo nos enseñaron inglés en nuestra época? Nos metían los verbos primero para que los supiéramos leer y escribir. Eso antes preguntarnos el nombre el primer día de clase. Y ya saben ustedes cómo es el nivel de los españoles en inglés en su mayoría. Falla el sistema de cómo enseñar. No es que seamos más torpes genéticamente. Tampoco les enseñan la tabla de multiplicar nunca, por ejemplo. Son pequeños detalles que dicen mucho.

 

bilingüismocolegioSin categoríatrilingüismo
Gema Lendoiro el

Entradas más recientes