El anuncio de la posible creación de una Superliga ha abierto muchos debates en torno al futbol. Es evidente que un año sin público en los estadios ha hecho mella en las cuentas de los clubes, pero los promotores de la iniciativa aseguran que detrás de esta iniciativa hay mucho más que eso. Decía Florentino Pérez, el presidente fundador del proyecto, que se trata de “salvar al fútbol”, que hay una gran desconexión con el público más joven: “no aguantan un partido entero, se les hace muy largo”. Según sus palabras, lo que ocurre es que “hay muchos partidos de escasa calidad y no les interesa, tienen otras plataformas para distraerse”. “El mundo cambia permanentemente”, decía, “y tenemos que cambiar algo si queremos que el fútbol siga viviendo”.
En menos de un día el proyecto -que no veían con buenos ojos ni la Unión de Asociaciones de Futbol Europeas (UEFA), ni la Federación Internacional de Asociaciones de Fútbol (FIFA), ni de los Gobiernos europeos- parece haber fracasado por el anuncio de la retirada de los seis clubes ingleses, pero, en todo caso, ha dejado clara la urgencia y el malestar de unas entidades que aseguran haber perdido 5.000 millones de euros y que no pueden esperar más porque “estamos todos arruinados”, en palabras de Florentino Perez.
El no tan silencioso crecimiento de los eSports
Mientras se planifica el futuro de las competiciones tradicionales, hay otros cambios en los que los clubes y los jugadores llevan tiempo trabajando y que sí han atrapado al público de todas las edades: los eSports y las ligas de Futbol Fantasy. Con estas ligas fantásticas los aficionados al fútbol pueden disfrutar de su pasión y sentirse cerca de su equipo y de sus jugadores favoritos: independientemente de dónde vivan, de si pueden o no ir al campo o seguir el partido por televisión o streaming.
Cada vez más consolidado, este universo representa un mercado, desconocido para muchos, que no deja de crecer. A nivel mundial, el valor de mercado de los Fantasy Games podría pasar de 18.600 millones de dólares en 2019 a 48.600 millones de dólares a finales de 2027, según las previsiones de Allied Market Research.
En España, la popular plataforma de Futbol Fantasy Sorare, admite que ha registrado un crecimiento notable. Cuenta con más de 15.000 usuarios y espera seguir sumando: “Hemos más que duplicado desde enero y esperamos tener más de 100.000 usuarios en España para finales de año”.
Los usuarios españoles son, además, de los más comprometidos. Dedican, de media, una hora y media diaria a jugar en Sorare, solo cinco minutos menos que los usuarios británicos que lideran el ranking.
Sorare cuenta con Gerard Piqué y Antoine Griezmann como inversores y ya tiene acuerdos con Real Madrid, Atlético de Madrid y Real Betis Balompié. Sus responsables confían en que “sumando más clubes españoles a Sorare, podremos crecer mucho más rápido tanto en España como a nivel internacional, lo que beneficiará al fútbol español en general”.
Los NFT y su valor de mercado
Aunque no hace falta conocer todos los detalles técnicos para disfrutar de Futbol Fantasy en Sorare, uno de los aspectos más interesantes de esta plataforma es el uso de los llamados non-fungible tokens. Este tipo especial de token criptográfico representa algo único. Son activos digitales indivisibles, indestructibles (los datos correspondientes están almacenados en un blockchain, como Ethereum) y verificables (en ese mismo blockchain queda guardado quién ha creado el token, quién lo ha transferido y quién es su propietario actual, algo así como un registro de la propiedad, pero para activos digitales asociados a una cadena de bloques en concreto).
En el caso de Sorare, las cartas son coleccionables digitales de un futbolista para una temporada concreta y con licencia oficial. Pueden utilizarse en diferentes aplicaciones y juegos y, como en otros activos de blockchain, los usuarios pueden acceder a la historia digital completa de la carta.
Uno de los aspectos más interesantes para los usuarios es que las cartas de Sorare es precisamente el hecho que puedan transferirse. Para la temporada 2020-21 hay tres niveles de cartas limitadas: únicas, súper raras (10 copias) y raras (100 copias). Su escasez hace que resulten más deseadas y, por tanto, más valiosas. Por eso, dentro de la plataforma se establece un sistema de pujas en el que cada propietario puede vender las cartas que posee al mejor postor, además de recibir ofertas en cualquier momento (estableciendo el precio mínimo que está dispuesto aceptar).
Como cualquier otra pieza de colección, su precio no tiene más límite que el de la cantidad que el comprador esté dispuesto a pagar. Hace poco más de un mes, un coleccionista pagó casi 300.000 dólares por la copia única de esta temporada de Cristiano Ronaldo. La cifra batió todos los récords de Sorare.
A día de hoy, Sorare no se aventura a estimar cuál será el crecimiento del mercado de los NFT, pero sí confirma que los más de 15.000 usuarios españoles de la plataforma han realizado transacciones por valor de más de 2 millones de euros… ¿Serán los NFT una forma de salvar el fútbol y generar algún ingreso extra para los aficionados?
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