Ángel González Abad el 18 may, 2017 La corrida de Parladé, con los remiendos del Montecillo, desesperó de principio a fin, y eso que el lote de David Mora no tuvo malos comienzos, pero tan poco… Tan poco, aunque tanto que hasta se hizo merecedor de una oreja del que cerró plaza, que en Las Ventas sigue el lío de los presidentes, pañuelo va pañuelo viene. Demasiados criterios y poco unificados, los usías están provocando la rechifla general. Ahora yo no la doy, ahora tu sí. Eso en cuanto a las orejas de más o de menos, por no meternos en lo que se aprueba por la mañana en los corrales… Y así las cosas, Iván Fandiño que, esta vez sí, se va para la localidad que ocupaba el Rey Juan Carlos y le brinda el toro. Ahora, “que no soy hombre de protocolos, este se lo brindo porque me sale del corazón”. Misión cumplida y aprobado en la asignatura pendiente. Claro, que el que aprueba día a día, y con nota, es el subalterno Ángel Otero. Cada vez más torero con los palos, en la corrida del jueves volvió a poner a todos de acuerdo, que como va la Feria tiene su mérito. Toros Comentarios Ángel González Abad el 18 may, 2017