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Blogs El talón de América por Carmen de Carlos

Victor Hugo Morales, Lanata, la dictadura y los DD HH

Carmen de Carlos el

Victor Hugo Morales, aquel locutor deportivo que bautizó a Maradona “barrilete cósmico”, es hoy la voz en la radio del ultra kirchnerismo. Desde Continental, donde ha tenido no pocos roces con los hombres de Prisa, defiende incondicionalmente el Gobierno de Cristina Fernández. En simultáneo y a diario, arremete contra la prensa no oficialista donde se alinean Perfil, La Nación y Clarín. También, contra los políticos que aspiran a ser oposición como el conservador Mauricio Macri, jefe de Gobierno de la ciudad de Buenos Aires, algo parecido a alcalde pero con más atribuciones. A éste, le profesa especial inquina pero tampoco escapan de su ira, ocasionalmente, políticos de corte socialdemócrata como Elisa Carrió, Ricardo Alfonsín y todo aquel que se cruce en dirección contraria al pensamiento oficial.

Victor Hugo, como le conoce Argentina, descalifica y abofetea en las ondas aquello que levanta ampollas en la sigla K. Con Magdalena Ruíz Guiñazú, miembro del informe de  la Conadep (Comisión para la Desaparición de Personas) el enfrentamiento llegó a ser noticia para los medios de comunicación. La periodista le pasa el testigo todas las mañanas en Radio Continental. La escena resulta insólita. Cuentan los testigos que se evitan las miradas y él, Victor Hugo, hasta la silla que dejó caliente Magdalena.

El locutor deportivo, reconvertido en referencia de la última corriente peronista inventada por el matrimonio Kirchner, ha resurgido en los últimos años como el abanderado de los derechos humanos tal y como los entienden, entre otras, la Presidenta de Argentina y Hebe de Bonafini (sí, la defensora de Eta, las Farc etc, etc).

VHM, siglas del locutor,  suele ser implacable con el pasado de personajes públicos cuando estos no comulgan con sus creencias. Pero, como dijo Estella de Carlotto en una entrevista que le hice hace más de diez años, “en Argentina hasta las Abuelas tenemos pasado”. Sólo es cuestión de rascar.

Victor Hugo es uruguayo aunque hizo fortuna y se estableció en Buenos Aires. Con el triple Gobierno Kirchner destapó su versión más antimilitarista y de denuncia de la dictadura argentina. Históricamente hubo y hay muchas otras voces que repudian el terrorismo de Estado pero la suya, por ese extraño efecto que hace estar junto a los que tienen el poder, parecía tener en estos tiempos más peso que la de otros.

El hombre, en una carrera veloz,  pasó de gritar “Goooooooool” a dar lecciones de democracia, derechos y libertades civiles. Ahora sucede, lo que suele suceder con los que presumen de inmaculados, que alguien, cansado de falsas verdades, rasca en su expediente y… encuentra. Dos periodistas uruguayos lo hicieron, han escrito un libro y han descubierto que VHM jugaba los fines de semana al fútbol con los “milicos” durante la dictadura. También, lograron imágenes de VHM pronunciando un discurso de agradecimiento y admiración a un mayor que hoy no entiende el discurso de su viejo amigo. El periodista argentino Jorge Lanata, azote perpetuo del poder desde los años 90, lo difundió en su programa de televisión, Periodismo Para Todos (PPT).

El escándalo de Victor Hugo, pateando la pelota los sábados con los militares de la dictadura y su estampa con discurso homenaje y maestro de ceremonias en la despedida de uno de ellos, ha tenido un efecto inmediato. Desde la presidenta de Abuelas de Mayo, Estela de Carlotto hasta Taty Almeida, miembro de Madres de Plazo de Mayo Línea Fundadora y Hebe de Bonafini han puesto el grito en el cielo pero… contra Lanata y en defensa de Victor Hugo. Estas cosas de Argentina son las que, aunque pasen los años, cuesta mucho entender.

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