No es el título de una canción; o al menos, de esa canción… En todo caso a mí me suena más al estribillo de un “jit” de Extremoduro: ” me estoy quitando…, me estoy quitando…, ya sólo me pongo de vez en cuando…” . O sea, a mí me suena de mí, que me estoy quitando del vicio festivalero. No estaré en el Festival de Venecia, aunque tengo la impresión de que a pesar de ello se va a celebrar estos días. He visto la programación, y ya me estoy arrepintiendo: ¿qué va a hacer Tsai Ming Liang sin mi habitual crónica garbancera sobre su cine impotable (se puede intercambiar lo de garbancera e impotable). No sé si al Festival, o a la ciudad, les pasa un poco lo que a mí, que ya me llega el agua a las rodillas, y subiendo. Seguiré con mi mejor espíritu las crónicas de mi amigo Boyero, auténtico látigo de ese cine con que se adorna Venecia, y tal vez no me “entere” de la actualidad y vivacidad del cine del mundo, pero me reiré un rato con sus padeceres. Ahora, como se ha puesto de moda Toronto, Venecia se ha quedado un poco mustio, lo cual le va de perlas al entorno y más le valdría al festival tomar nota de ello. ¡Viva el cine mustio!
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