Hubo dos partidos del Mundial, el de Inglaterra contra Trinidad y Tobago y el de Suecia contra Paraguay, que fueron una pura intriga hasta el final. La tensión, la angustia, el ‘thriller’… no son un patrimonio exclusivo del cine, aunque en él se hayan afilado al máximo. Si el deporte ‘angustioso’ por excelencia suele ser el baloncesto, donde los últimos segundos es algo así como un espacio sin tiempo y sin oxígeno, tendríamos que repasar en nuestra memoria filmográfica para encontrar allí la película que más angustia nos ha causado. Personalmente, nunca lo he vuelto a pasar tan mal como cuando vi ‘Alien’ por primera vez… De vuelta a casa, solo ya en el ascensor y con los ojos miedosos en cualquier rincón y hierro, tenía los nervios como las cuerdas de un banjo.
No soy muy amigo de las películas de miedo, y mucho menos de las de sustos; por eso me gusta más el fútbol que el basket, sobre todo si se gana por 6 goles a 0, como Argentina.
A mí, ‘La profecía’, o sea, la de Richard Donner, a punto estuvo de cambiarme el metabolismo del miedo que pasé.