No podía llegar en mejor momento el estreno de “Los Miserables”, en plena Navidá, que no sé si el título viene además con segundas. Como aquel “siente un pobre a su mesa” de Berlanga. A mí, que más que oídos tengo orejas, el género musical me exige mucho…, y aún en el cine lo puedo llevar y disfrutar, pero en el teatro (especialmente el teatro patrio) me he pegado unos aburrimientos homéricos. Aún recuerdo que tuve el valor de ir a ver aquella producción (creo que de Tamayo) que hicieron en Madrid,y más aún, tuve el valor de largarme en cuanto hicieron un descanso… He visto musicales por ahí fuera (quiero decir en Londres y Niuyor) y, francamente, me han gustado mucho. En fin, lo que quiero decir es que el hecho de que me haya gustado la película de Tom Hooper no tiene mucho que ver con la calidad de las voces de Hugh Jackman, Russell Crowe y Anne Hathaway, que, al menos los dos primeros, tienen la voz tan justita como yo el oído. Pero sí creo que está bien nutrida de talento la parte dramática de la historia, que a mí es lo que me gusta. Y el montaje es, de arrancada, espectacular. Y sí, a Hathaway la condecoran seguro.
cine Oti Marchanteel