Al pobrecito Barcelona le prohibieron fichar por sus inventos fiscales para no pagar a hacienda el porcentaje de los 110 millones que costaba Neymar y ahora se ha labrado, desde la prensa azulgrana y desde el antimadridismo latente, un aura de victimismo porque el conjunto barcelonista no puede fichar y el Real Madrid sí.
Florentino Pérez no contrató a Neymar porque es sabido que el presidente madridista paga todo en blanco, nunca mejor dicho, no admite ni un euro de caja B, y lo expuso con claridad: Neymar vale 110 millones y con su ficha sale a más de 145 millones y no lo tenía claro, porque surgen muchos acreedores que dicen tener parte de su contrato. Llegó “Sandro”, presidente azulgrana, y adujo que Neymar valía 60 millones. Vamos, que Florentino es tonto desde que nació y en su casa no lo sabían. Que ACS le tocó en una tómbola y que “Octava” (en inglés), su gran empresa en Australia, es una pastelería de cemento.
Hacienda pilló al Barcelona. Y a Messi. Pero el ambiente es de pobre Barcelona, que no puede fichar. Mientras, Benítez crea en tres meses un Real Madrid sólido, es líder, solo le han hecho tres goles y se destaca que la defensa es un coladero y que si no fuera por Keylor le habrían marcado una docena de goles. Se le juzga de manera negativa, con una barra de medir absolutamente opuesta.
Solo pienso si la historia fuera al revés. Si Florentino llega a defraudar al fisco por Neymar, lo encarcelan, porque el Real Madrid no puede hacer esas cosas (los demás, por lo visto, sí). Y si el Barcelona fuera líder como lo es ahora el Madrid, con solo tres goles en contra, estarían diciendo que se ha regenerado tras el adiós de Puyol y Xavi. Nadie recuerda que en el Madrid se han ido Xabi, Ozil, Di María e Higuaín. Parece que al Madrid llegan los jugadores ya hechos y adaptados. La barra de medir es muy diferente. Sospechosa. Si Ramos dice la concha de tu hermana, como hizo Mascherano, desde la prensa catalana estarían pidiendo cuatro partidos de suspensión. Como es Mascherano, dicen que es una expresión coloquial.
Hay una medida diferente para el Madrid y el Barcelona. Y el invento del juez de línea presionado para que pite a favor de los blancos en el clásico, cuando ni siquiera se sabe si ese linier estará en el clásico, parece el remate de un aura de beneficiar al Barcelona desde todos los ámbitos. Poco inteligente es tocar a todos los linieres. Será más cuerdo tocar al equipo arbitral que se sabe que dirigirá con seguridad el clásico. Pero la prensa catalana habla de complot. Y todos los medios tiran del invento para rellenar páginas y minutos. Y no hay ninguna verdad. Y sale el abogado Jacinto y dice que su presunto linier nunca dirá el nombre y que lo normal es que se archive la causa. Y denuncia de todos modos. Huele mal. Muy mal.
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