La titularidad en el campeón de Europa está muy cara y ya se ponen difíciles hasta los minutos. Hay tanta calidad y tanto futbolista de nivel a las órdenes de Zidane que hay que ganarse el sitio y las oportunidades con sacrificio y actitudes positivas. Morata y Lucas Vázquez, internacionales con España en la Eurocopa, se han incorporado ya a la disciplina del Real Madrid sin cumplir las vacaciones que tenían. Eliminados de la Euro 2016 a finales de junio, han vuelto a los entrenamientos porque Zidane los necesita en forma para disputar la final de la Supercopa de Europa el 9 de agosto.
En el caso de Álvaro, sabe que Cristiano es duda para se partido frente al Sevilla y el entrenador cuenta con él como delantero centro. Jugará seguro, ya veremos si como titular o en el segundo tiempo. Porque Bale se integrará al plantel el 31 de julio y también llegará justito para la final, después de disputar hasta el 7 de julio las semifinales de la Eurocopa con Gales. Por eso ha retornado también Lucas. Los dos canteranos tendrán protagonismo en la primera final del nuevo curso. A ellos se añade Kovacic, que vino el 15 de julio, desde el primer día, a trabajar, aunque estuvo también en las Eurocopa hasta octavos de final, al igual que España. Son tres espejos a los que debería mirarse James, que se reintegrará el 26 de julio. El colombiano debe regresar al equipo con actitud positiva, con la intención de querer ganarse el puesto. Ya ha comprendido que aquí nadie tiene el puesto fijo.
Otros temas Tomás González-Martínel