El Real Madrid planifica el cambio de su columna vertebral. Ha llegado el momento de hacerlo paso a paso, no de golpe. Muchos jugadores han entrado en la treintena y el cambio deberá producirse paulatinamente.
El pasillo de seguridad lo han formado durante años Keylor, Ramos, Modric, Kroos, Benzema y Cristiano. Ahora, el portugués ya no está. Navas deberá escuchar si es titular o no con Zidane para decidir su futuro. Ramos tiene todavía dos o tres años de fútbol en el Real Madrid. Modric continuará un año, pero el relevo está cerca, por una mera cuestión de edad: cumple 34 años en septiembre. En este sentido, la próxima temporada jugará como media punta, sin ejecutar obligatoriamente la labor defensiva, porque ya no hay fuelle para ambas misiones. Y Benzema seguirá en la casa con el apoyo de Zidane, gracias su mejor rendimiento en la madurez, pero el Real Madrid ya busca un delantero de relevo, Jovic, y en su pensamiento a largo plazo tiene al hombre que rematará el cambio de columna: Mbappé. El joven francés acaba contrato con el PSG dentro de dos años y el club blanco irá a por él para culminar el gran cambio del esquema del equipo. Se producirá en un año o en dos.
Mbappé será la punta de lanza de un cambio que comienza por Hazard, al que el Real Madrid espera tener en julio. A su lado debe estar Pogba, Eriksen o Ndombelé. En defensa, Varane debe saber tomar las riendas de Ramos, con la esperanza de tener en Militao a un futuro líder. Y Courtois es el guardameta del próximo lustro.
Esa será la nueva columna de seguridad. A tres años vista. Empieza a construirse ahora. Mbappé es el final. Pero si en el camino se cruza Neymar, también entrará en el proyecto.
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