Si ya en el siglo XIX, Eugène Rimmel creó la primera máscara de pestañas (de ahí que se la conozca como “rímel”), ahora esta firma lanza Volume Colourist, la primera que, además de maquillarlas, las tiñe!
Su fórmula incorpora unos colorantes naturales, que oscurecen gradualmente el color de tus pestañas.
Además tiene, por supuesto, los clásicos pigmentos (en este caso, negros) de cualquier otra máscara, que hacen que al instante se vean las pestañas más abundantes y largas.
Pero, la diferencia es que al efecto maquillaje, le suman el del tinte!
El color va adquiriéndose con el uso, y al cabo de 2 semanas, las pestañas estarán negras azabache de la raíz a las puntas!!
Porque la principal “gracia” del tinte, es que oscurece la punta. Ésta, incluso en los pelos más negros, es siempre más clara que la raíz, y eso hace que las pestañas se vean más cortas de lo que son, y parezca que hay menos cantidad.
El tinte se empieza a fijar en la primera aplicación, y continúa intensificándose con las siguientes.
Y no irrita los ojos. Se trata de una coloración semipermanente, que no penetra en las pestañas, sino que se queda en superficie.
Algunas os preguntaréis, ¿para qué teñiros si ya os ponéis máscara?
Para mi está clarísimo: me encantan los ojos maquillados por la noche, pero el efecto de la máscara me parece excesivo para el día (me veo muy Betty Boop). Sin embargo, sí me gusta como se me ven los ojos con las pestañas oscuras (en vacaciones me hago siempre un tinte+ rizado para verme con pestañones desde que amanezco, porque tengo mi casa siempre llena de invitados, y así se disimula mejor la mala cara que tengo al despertarme! Este verano, me lo ahorro!!) .
Por eso, he estado usando Volume Colourist durante diez días seguidos. Y ahora, por la mañana tengo las pestañas suficientemente oscuras, pobladas y largas y cuando salgo por la noche, intensifico el efecto con la máscara.
¿Lo único malo? Para no perder el resultado conseguido tengo que seguir aplicándome máscara de vez en cuando, aunque no salga de juerga!! Si no, el color empieza a desvanecerse, poco a poco, después de su último uso, y desaparece por completo en dos semanas.
De momento, solo está disponible en negro, aunque para navidad lanzarán Extreme Black, que será más intenso.
Y se elimina con cualquier desmaquillante.
Más buenas noticias: solo cuesta 7,5€, en perfumerías
Y una mala: al contener tinte, no es muy recomendable para ojos sensibles. porque puede producir alergias.
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