Después de que Santiago Segura rescatara a Tony Leblanc para ‘Torrente’ en 1998, el actor fue contratado en ‘Cuéntame’ para interpretar a Cervan, el quiosquero. Permaneció en la serie de 2001 a 2008, hasta que se cansó por la falta de protagonismo, por no tener más que frases sueltas, por no hablar a veces más de 30 segundos. Al fin y al cabo, los niños dejaron de comprar tebeos. Lo contó en una entrevista en ‘Pronto’: “Me dijeron que se había buscado un personaje a mi medida, pero poco a poco se fueron reduciendo mis diálogos, pero, si Dios quiere, me verá todo el mundo en nuevos trabajos. He tenido ofertas a lo largo de estos años, y no las he aceptado por respeto a la serie (…) Quiero y debo mucho a TVE, la cadena en la que se emite”.
Es verdad. Independientemente de su trabajo en el cine, Tony Leblanc era un personaje de la televisión, de la única televisión española. Un actor legendario con recordadas ‘catchphrases’ (“Del gimnasio a la Casa de Campo, de la Casa de Campo al gimnasio” decía su Kid Tarao, este sí, cinematográfico). Un humorista que en la tele lo mismo tiraba de su Cristobalito Gazmoño que pelaba una manzana en el programa de un bigotón Íñigo en el Florida Park (“algo que nunca antes se había hecho en la televisión”). Como intérprete también había sido un actor de la pequeña pantalla. ‘El que dice ser y llamarse’ (1963), ‘Escuela de maridos’ (1964), ‘En órbita’ (1967) o ‘La venganza de don Mendo’ (un Estudio 1 de 1972). Sin olvidar que puso el humor en ‘La gran ocasión’, antepasado de ‘Salto a la fama’, ‘Gente joven’, ‘OT’ o ‘La voz’, un programa presentado por Miguel de los Santos entre 1972 y 1974 donde debutó como azafata Marisa Abad (para luego ascender). Recientemente, a Tony Leblanc lo vimos en ‘Sabías a lo que venías’ (2007) en La Sexta, otra vez de la mano de Santiago Segura, que tanto lo ha cuidado.
Pero el de Cervan es su último personaje televisivo (aunque siguió con Torrente). Igual que el último de Judith Anderson fue el de Minx Lockridge en ‘Santa Barbara’. Pero en el caso quien fuera la señora Danvers de ‘Rebeca’ sí que fue su último trabajo. El penúltimo había sido ‘Star Trek III. En busca de Spock’ como alta sacerdotisa vulcaniana en 1984. Y justo ese año empezó en ‘Santa Barbara’, ciudad donde además había vivido casi toda su vida (era australiana). En la ‘soap opera’ que aquí emitió Antena 3 tuvo la misma queja que Tony Leblanc. Salía muy poco en pantalla. E igualmente dejó la serie, aunque en su caso fue sustituida por Janis Paige. Otra cosa en la que coincidían era en ser adorables en el set con el resto de los actores, todos esos actores y actrices que no les llegaban a la suela del zapato. El sábado, La 1 puso ‘Tata mía’, donde el también desaparecido Borau rescató a la gran Imperio Argentina. En la película, la actriz y cantante era la estrella evidente, por mucho protagonismo de Carmen Maura. Pero la legendaria artista se sorprendía porque muchos de los que trabajaban en la película no sabían quién era. La lástima es que tienen que morirse para hacerse recordatorios generales de grandeza.
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