Balenciaga y las fallas

Una vez acabada Fama ¡A bailar! (cielos, que viene Fama School, para mengajos), tenemos Supermodelo 2008. Me gusta la tele. También la mala. Y conocer gente nueva (para ello, mejor la de la tele; si está pirada al menos no sabe ni tu número ni dónde vives). En Fama, en una noche de sorpresas, con los padres de pronto apareciendo por la espalda y, hala, todos a llorar, han ganado Vicky en individual y Lorena y Juancar en parejas. Lorena y Juancar son nombres como ideados para las pintas que tienen (igual se podrían haber llamado Yeni, así escrito, y Jonathan). En fin, tengo que decir que desde que echaron a Marcos (pareja inicial, y hasta que ella no pudo más, de Lorena) dejó de interesarme Fama.

Supermodelo, esta vez mixto, parece estar llena de marcos (y de gente fea). Por todos lados. En esta edición, en la que han emparejado a chico y chica (no en los camarotes) se han ido en barco por el Mediterráneo. El barco es como para salir corriendo (Judith Mascó ha salido corriendo y la presentadora es otra) pero los chicos entran y dicen ‘Oh, qué pasada’. Pues vale. Lo bueno de ir en barco es que podemos utilizar la palabra singladura (en Segundo de BUP yo la utilicé, con todos mis eggs, para un trabajo sobre el Mío Cid y la profesora, que era adicta al rotulador rojo y precursora de House pero en profesora de Literatura, me anotó con toda la razón : ‘¿Es que iban en barco?’. Desde entonces no utilizo la palabra, y tampoco lo voy a hacer ahora).

Una de las cosas buenas de Supermodelo (uno de los peores realities de la tele) es que a la mayor parte de los profesores no se les entiende una papa lo que farfullan. Deben de hablar el supermodelí.  Así, Emmanuel Rouzic, el fotógrafo (que repite), Mari-Ange Schmitt (la nueva profesora de pasarela) y Josie, el estilista que sustituye a la ‘hortera de bolera’ y que antes del estreno ya se había convertido en la mascota del programa. A star is born. Cuando salió como tío raro en Vidas anónimas en La Sexta, y ya parecía el personaje gay amable de una telenovela venezolana, sus amigas decían que era como Truman Capote. No siendo Capote santo de mi devoción, no sé dónde estaría el parecido. Quizá también en la extraña voz (su archienemigo Tennesse Williams aseguraba que Capote tenía una voz tan aguda que sólo podía detectarla un murciélago). 

El primer día ya tuvo lugar un diálogo memorable entre Josie y un candidato bastante feo y garrulo a Supemodelo. El candidato (¿a Supergañán?) va y se tira al suelo de la pasarela con su bonita camisa marrón de rayas. Y el otro, que es de los que se pasma sin aspavientos, le pregunta what the fucking hell está haciendo.

-Si me tengo que tirar al suelo pues me tiro. Es que lo hice en el casting de Valencia y me dio suerte.

-(Josie ha entendido Balenciaga). ¿Qué es para ti Balenciaga?

-(Supergañán sigue a lo suyo) ¿Valencia? Todo. Me encantan las fallas. Soy muy fallero…

-Pero has dicho el casting de Balenciaga.

-De Valencia

-Ah, creía que habías dicho el casting de Balenciaga

-De Valencia

-¿Conoces a Balenciaga?

-No, no tengo el gusto.

Por cosas como esta tengo alguna esperanza en Supermodelo (el de la foto es Cristóbal Balenciaga cayéndose de lado ante lo que ahora se llaman estilistas de moda y ante los percales que quieren ser modelos).