En este escenario, y al margen de las cuestiones esencialmente polÃticas, es interesante analizar en clave regional la relación observada entre el bipartidismo y la evolución económica reciente. Para ello, se interrelaciona la concentración del voto en España (proporción del voto total de las dos candidaturas más votadas de cada Comunidad Autónoma, como promedio de las Elecciones Municipales de mayo de 2011, Generales de noviembre de 2011, y Europeas de mayo de 2014), con la evolución de las principales magnitudes económicas regionales en el perÃodo (2011-2014), tal y como muestran los siguientes gráficos.
Fuente: Ministerio del Interior.
El crecimiento económico mantiene una relación ligeramente negativa con la concentración del voto: a mayor relevancia del bipartidismo, menores ritmos de avance del PIB regional.
En sentido inverso, las Comunidades Autónomas donde dos partidos polÃticos acaparan mayor proporción del voto, registran los niveles más altos de desempleo y, paradójicamente, un mayor dinamismo exportador.
Para el caso de la deuda pública y la inflación, a priori, no se evidencia una relación determinante con la concentración manifestada en las urnas.
Desde el punto de vista empresarial, las empresas de las regiones con mayor relevancia del bipartidismo muestran menores niveles de confianza en la actividad que las Comunidades con mayor dispersión del voto.
El próximo año 2015, con citas electorales en materia local, autonómica y nacional, determinará si la nueva tendencia social se consolida o pierde vigor, con los previsibles efectos diferenciales sobre las economÃas regionales en función del nivel de concentración de las preferencias ciudadanas depositadas en las urnas.