Carlos Maribona el 07 oct, 2005 Las crÃticas que en este espacio he vertido contra algunos cocineros recién llegados no significan que desprecie el trabajo de muchos otros jóvenes que lo hacen muy bien. He estado estos dÃas en un restaurante madrileño abierto hace pocas semanas precisamente por un equipo de jóvenes profesionales. Se trata de un lugar informal, puesto con gusto, con ese toque moderno que no cansa ni abruma a los que ya rondamos el medio siglo. Y con un producto en torno al que gira toda la carta: la tortilla de patata. Tortillas que se sirven enteras en platos especiales y se combinan con muchas cosas, desde la tradicional (que es la mejor) hasta la guisada con callos pasando por la de patatas chips con salmorejo o la recubierta de tinta de calamar. Hay más cosas pero descúbranlas ustedes. Los responsables son los hijos de los propietarios de dos restaurantes bien conocidos en Madrid: La Ancha. Ellos apuestan por la cocina tradicional y sencilla, por los precios contenidos (dentro de lo que cabe) y por la calidad del producto. La respuesta del público no puede ser mejor hasta el momento. No todos los jóvenes se equivocan. Y eso es muy bueno para todos. El sitio se llama Las Tortillas de Gabino (Rafael Calvo, 20. 91 319 99 73). Se lo recomiendo. Otros temas Comentarios Carlos Maribona el 07 oct, 2005