Explota, explota, me expló. Yo también me arrodillo

Pues menos mal que no ganó la melíflua Coral. Casi me da algo cuando la vi como finalista. Ahora, ya veremos si el chiste privado y lo que nos vamos a reír aquí con Rodolfo Chikilicuatre no se lo pasan en Eurovisión por el forro del guayominí (si Silvia Abril, una de las gogós, se vuelve a caer, lo mismo llamamos más la atención).

 No nos atrevimos a mandar a Las supremas de Móstoles, pero esta vez sí ha caído el candidato del frente freak. ‘Una chispa de alegría’, que diría Rosa de España. Y ‘Una broma de internet’, según Uribarri. Aunque lo de freak sería muy discutible. Porque una cosa es ser un freak consciente y otra serlo sin saberlo. Y la mayoría de los que vimos en Salvemos Eurovisión era del frente petardo: las Ellas eran entre Lucía (ven, tengo libre de ocho a diez, luego tengo que estudiar) y las Baccara (por la coreografía). Para guardarse la pieza. Y sólo faltó que Raffaella Carrá les pidiera que cantaran Desde Santurce a Bilbao (una es de Santurce y la otra de Bilbao, claro).

Guille Milkyway se quedó tercero con La revolución sexual, la canción que presentó La casa azul. Es lo que tiene dar la palabra al público (cuando se conoció el triunfo de Chikilicuatre, se oyeron en el plató unos cuantos ‘Fuera, fuera’). Mientras escribía sobre la marcha, y con el tiempo encima, puse en mi artículo expréss, como título provisional, que La casa azul iba a Eurovisión. Ni modo. Todos a bailar el Chiki Chiki. Lo mejor era que todos los contertulios hablaban con displicencia (aunque con cariño) de la canción. Que sí, que qué, chula, que es la canción del verano, que quizá no sea para Eurovisión. Toma Moreno (o Toma Buenafuente).

 Música aparte, en cuanto al programa, me pareció muy adecuado. Tratándose de lo que se trataba. Los tertulianos (aquí el más freak es Uribarri), el ritmo (la palabrería necesaria para cambiar el escenario), los animadores (tanto Muchachada Nui, con perfil bajo, como The Chanclettes) y, por supuesto, Raffaella Carrá. Explota, explota me expló (con acento en la o, como le preguntó Carlos Areces). Raffaella Carrá a Eurovisión.

(Las previsiones de Uribarri iban entre Coral y La casa azul. De público europeo sabrá mucho; del español, menos).