Rosa Belmonte el 04 may, 2014 La televisión no capta la pobreza. La de ficción. Como si fuera el vuelo de un colibrí frente al torpe ojo humano. Esta semana, B&B ha ganado por primera vez a ‘Con el culo al aire’ (por delante, siempre ‘Master Chef’). La serie de Antena 3 nació como una comedia en tiempos de crisis, con gente venida a menos (o nunca salida de lo poco) que vivía en un camping. Más allá del original escenario, ha sido una comedia como cualquier comedia española. El cine español, el azconiano, el de ‘El pisito’, ha retratado muy bien a los desfavorecidos, pero lo que es la televisión… Quizá ‘Aida’. Quizá ‘Mujeres’, pero porque la serie de Félix Sabroso y Dunia Ayaso es una excepción a todo. Cuando se tira de ese espantoso lugar común de que la televisión ahora es mejor que el cine no hablamos de lo que pasa en España. Sin embargo, y ahí sí que tengo que dar la razón al tópico, la estupenda ‘Shameless’ (Showtime, Canal +), remake de otra británica, es la serie que mejor cuenta lo que es ser pobre en Estados Unidos. Por encima de cualquier película. (Tampoco hay que perder de vista la deprimente ‘Getting on’.) Pero en ‘Con el culo al aire’ de pronto tienen una jornada de paintball (?). También es posible que no queramos ver pobres más allá de ‘Callejeros’ y los informativos. María León es una de las habitantes del camping televisivo. También es una presencia permanente en la televisión de los últimos días. Ella y, sobre todo, su hermano Paco. La promoción de ‘Carmina y amén’ hace que pongas la tele y te los encuentres. Paco León es como Judith Anderson en ‘Rebeca’. La película es de Telecinco Cinema, así que solo le falta salir en ‘Premier Casino’. Ayer, en ‘Qué tiempo tan feliz’ y ‘Hay una cosa que te quiero decir’. Antes en todo lo demás, desde ‘El programa de Ana Rosa’ a ‘Hable con ellas’. Precisamente, Yolanda Ramos tiene la escena más descacharrante en la película. Una película de pobres. Tragicómica, costumbrista, magnífica. Que se me salten los puntos si me dejo de reír. Paco León sí sabe hacerlo. Sus ojos (y sus oídos) captan el vuelo del colibrí. Y a su señora madre. Sin categoría Comentarios Rosa Belmonte el 04 may, 2014