No vamos a mentir. El sorteo de cuartos de final de Champions League ha sido benévolo con el Madrid. El Galatasaray no es el Bayern, sólo faltaba. Sería muy hipócrita pensar eso. Pero este hecho no es óbice, como ya escribí antes del sorteo, para minusvalorar y considerar al equipo turco un ‘saldo’ de las rebajas de febrero. Ni mucho menos. Lo dije y lo mantengo. El equipo otomano es un buen conjunto, sobre todo, de medio campo para adelante. Además, tiene un ‘perro viejo’ (Fatih Terim) del fútbol en el banquillo, dos campeones de Europa en el campo y la vuelta en Estambul será un hervidero y un ‘patatal’. Sí. Vale. No es el Bayern. Pero tampoco es el APOEL de Nicosia, ese mollar contrincante del Madrid la pasada temporada en esta misma ronda del torneo.
Quizás la clave de la eliminatoria esté en el Bernabéu, en la ida. Hace dos años fue así el orden. Entonces, el Tottenham se fue con un 4-0 y el Madrid con la eliminatoria resuelta. Es cierto, también, que la temprana expulsión de Crouch ayudó a ello. Por ello, el Madrid tiene que plantear el primer ‘combate’ con un plus de ‘agresividad’ y de ambición superior al habitual. El objetivo debe ser una renta amplia y portería propia a cero. Los turcos vendrán a encerrarse, esperando las peligrosas contras de su tridente ofensivo: Drogba, Sneijder y Yilmaz, pichichi de la Champions junto a Cristiano. Y aunque pueda poner el autobús, ellos donde son más frágiles es en esa faceta: la defensiva. Eboue y Riera en los laterales ‘pierden’ sus espaldas bastante a menudo; el nivel de los centrales: Ujfalusi, Inan y Kaya, no es el propio de la altura de competición en la que se encuentra la Champions; y su guardameta, el internacional uruguayo Muslera, da más de cal que de arena.
Eso sí, mal haría el Madrid en pensar que ya está en semifinales. Leo ojiplático en las redes sociales y noto en cierto sector del madridismo que jugar con el ‘Galata’ es casi como tener una polución nocturna. No creo que ni la plantilla ni Mourinho se contagie de ello. La Décima es posible. Claro que sí. Soñar con ella está legitimado. Pero primero, hay que eliminar a los turcos y luego quedarán aún las semifinales y una hipotética final. ‘Piano a piano, si va lontano’.
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