A la vista de lo que estamos viendo en Las Ventas, cabe preguntarse cuál es el toro de Madrid. Pues mire, cualquier cosa menos lo que está saliendo por toriles. Cada año, los ganaderos y todo el entramado taurino tienen justificación con el clima.
Que los toros no están rematados, la culpa es de la sequía. Que este año están saliendo birrias, una detrás de otra, la culpa de todo la tiene el agua que cayó este invierno. De la sequía al aguacero, pero que el toro sigue sin salir en esta Feria de San Isidro. Desde los de Salvador Domecq de la corrida inaugural, hasta los de Parladé de ayer tarde, un rosario de mansos, de inválidos, de feos, de bueyes, la mayoría faltos de hechuras de toros bravos. Ojalá que la cosa cambie a partir de hoy, aunque, si todo sigue igual, recordemos que la culpa la tendrá el agua.
Toros Ángel González Abadel