Tenía porte y bautismo de gran jefe del Wall Street de Alcurrucén. “Economista” se llamaba, un toro con bautismo del 10/12, herrado con el 146 y de 560 kilos. Esos eran los números de “Economista“, un toro para cotizar al alza en el mercado de valores de la Fiesta, bravo y con profundidad en la embestida, para apostar y triunfar en la bolsa de Valencia o el mismísimo Nueva York.
Y David Mora apostó y triunfó, con emotivo y estupendo toreo por momentos con un lote de gloria mayor. Pero por la ecuación “x” o “y” no salen las cuentas de la corrida, que se arrastró con orejas que debieron ser galones. Ni del conjunto del encierro, ni con ese cuarto superior, que será uno de los Núñez de la temporada. Se llamaba “Economista” y las cifras no cuadran. Solo una oreja de una corrida de, pongamos, ¿seis? Que un bróker lo explique…