La muerte de Spencer

Si tengo que elegir entre mis series favoritas de los últimos años, creo que me quedo con El ala oeste, por lo menos con las tres primeras temporadas (aunque no se me olviden ni Los Soprano ni Babylon 5 ni muchas otras, entre las que no está CSI, desde luego). Porque la serie de Aaron Sorkin me parece extraordinaria  y porque el staff de la Casa Blanca me resulta casi de la familia siento mucho la muerte de John Spencer (Leo McGarry). En la última temporada coincidía con Jimmy Smits, con quien también compartió otra serie memorable: La Ley de Los Ángeles. En ésta, Spencer era el abogado Tommy Mullaney, aquel que estaba divorciado de la guapa fiscal Zoey Clemmons (Cecil Hoffmann), lo cual era difícil de creer (que alguna vez hubieran estado casados). Ella a su vez salía con el abogado Jonathan Rollins (Blair Underwoood). Y el atractivo actor negro, años después, sería vecino/novio de Miranda en Sexo en Nueva York. Dejo el rollo pero es que en las series de televisión se pueden seguir perfectamente lo de los seis grados de separación. Sigo con Leo McGarry, que ha fallecido de un infarto y, por tanto, de repente, con lo que ha dejado colgado su personaje en la ficción. Ahora habrá que ver cómo lo resuelven. Supongo que no tan bien como hicieron en Hill Street cuando Michael Conrad (el sargento Esterhaus) murió de un cáncer. En el guión se suponía que la había palmado en los brazos de su novia Grace, la ardiente  e insaciable pelirroja interpretada por Barbara Babcock.