El decisivo Real Madrid-Barcelona, del próximo 23 de marzo, que puede decidir la Liga ya ha comenzado a disputarse. Sino que se lo pregunten a Fabio Coentrao y Alex Song que, anoche, en el Portugal-Camerún, casi acaban a mamporrazo limpio. Ocurrió a la media hora de partido, cuando con 1-0 en el marcador, el lateral blanco peleaba un balón por su banda en una acción ofensiva de los lusos. En dicha jugada, llegó Song para tapar la subida de Coentrao y logró arrebatarle el esférico. El madridista intentó recuperar la bola pero la potencia física del camerunés se lo hizo imposible. Song tapó muy bien con su cuerpo la pelota y Coentrao, en el intento de quitarle el cuero, acabó cometiendo falta sobre el mediocentro azulgrana. Hasta aquí un lance más del juego.
Lo que ocurrió es que a Song no le pareció correcta la entrada de Coentrao y tras caer al suelo, se levantó, se revolvió y empujó a Coentrao de modo intimidatori0. El jugador merengue no se achicó y le devolvió el empellón y ahí comenzó un amago de golpes que no fue a más gracias a la intervención de los compañeros de selección de ambos futbolistas que pusieron calma a la refriega. Un rifirrafe de alta tensión que nos recordó a los ya vividos por culés y azulgranas en los famosos clásicos de las últimas temporadas, con Mourinho y Guardiola en los banquillos de ambos clubes. La pelea, finalmente, quedó en una anécdota y lo importante fue la goleada de Portugal a Camerún (5-1) y el doblete de Cristiano que le convertía en el máximo goleador de la historia de Portugal, con 49 tantos. Eso sí, la trifulca entre ambos debería ser un aviso para navegantes. Hay una Liga en juego en el Santiago Bernabéu dentro de dos semanas y el deseo es que salga vencedor el mejor y, a poder ser, de manera limpia. Primero el fútbol y, después, también el fútbol.
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