El obsceno chantaje de la unidad
La llamada a la unidad por parte de Sánchez es tan ridícula que llega a lo obsceno. El tipo del “no es no”, y del “¿qué parte del no no ha entendido?”, vende unidad a los representantes del índice selectivo…
La llamada a la unidad por parte de Sánchez es tan ridícula que llega a lo obsceno. El tipo del “no es no”, y del “¿qué parte del no no ha entendido?”, vende unidad a los representantes del índice selectivo…