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Para que lo que nos espera sea lo deseado

Para que lo que nos espera sea lo deseado
Giuseppe Tringali el

Hemos entrado en un mundo nuevo, un mundo global, un mundo donde la información corre rápida, acción y reacción son inmediatas,  los antiguos esquemas se han roto, la innovación es clave y todo es más transversal y competitivo. 

En este nuevo mundo la comunicación tiene una importancia fundamental.

A través de la semántica, las palabras pueden facilitar la comprensión de dónde estamos y de qué necesitamos, palabras como: 

Visión

Responsabilidad

Ética

Participación

Colaboración, 

Plataformas

Ecosistemas

Evolución 

Flexibilidad

Iniciativa

Creatividad

Innovación

Para las sociedades, las empresas y los Estados han cambiado los paradigmas.

Nuevas soluciones, nuevas ideas no son una opción, son la única vía.

A la sociedad, la nueva tecnología ha dado un protagonismo sin retorno, protagonismo que todavía se utiliza más en el ejercicio  de la crítica, que de las propuestas, de las iniciativas.

Hoy el individuo puede ser en su día un motor y no una rueda, las cosas no pasan por si solas.

El mundo Empresarial está centrado en generar valor a través de las nuevas herramientas informativas, tecnológicas y en experimentar plataformas y ecosistemas colaborativos.

Las Empresas a parte de producir productos u ofrecer servicios, se ocupan de lo social, del ambiente, se preocupan de ser éticas, de ser sostenibles y de ser competitivas sin fronteras.

La política está en discusión, todavía  no  ha interceptado de manera suficiente las necesidades de la nueva sociedad.

Una sociedad abierta, multiétnica, demográficamente distinta y económicamente global.

La política viaja entre resistencia, desconfianza, ideas poco definidas, localismo y populismo.

El populismo por ejemplo capta fácilmente las protestas pero propone soluciones opuestas a las adoptadas en los países más avanzados que son los que tienen que ser las referencias para mejorar.

La política necesita ética, visión, sostenibilidad y competitividad.

Ética para ser referencia creíble, visión para imaginar la sociedad del futuro, 

Sostenibilidad y competitividad en lo económico y en lo social,  en la economía y en el welfare ….

No se trata de cambiar, se trata de evolucionar, de innovar, de estar dispuestos a unas acciones continuas para estar al paso con el devenir. 

Son necesarios: responsabilidad, ética, sentido del interés general y visión a largo plazo. 

La contraposición tiene que ceder el paso a un dialogo desarrollador de nuevas ideas para que  las mejores, las que más se adapten a la evolución de la sociedad y del mundo sean elegidas.

En este nuevo mundo tan competitivo el individuo con su gran potencial va incentivado o formado para ser parte activa de la mejora de la sociedad  y de la generación de riqueza. 

La cultura de la iniciativa va premiada. 

La iniciativa y la inversión privada tienen que poder contribuir a sostener el estado del bienestar que los Países  ya no pueden mantener si no es a costa de más impuestos.

¿Es sostenible una sociedad que no tiene servicios eficientes?

¿Es sostenible una sociedad que no es puntera en la formación y la educación?

¿Es sostenible una sociedad que conserva y no innova? 

¿Es sostenible una sociedad que no acepta el desafío global?

¿Es sostenible una sociedad en la cual tienen más sentido los derechos que los deberes?

No tenemos alternativas, es imprescindible ir adelante, ir a mejor. 

La política tiene que crear las condiciones para que esto se consiga. 

La cultura liberal en el pensamiento, en lo social y en la economía, la cultura de generación de riqueza que pase por la iniciativa y la aportación de cada uno, ¿puede ser la vía para la mejora? Siempre he pensado que la libertad de iniciativa es lo que mueve todo: «querer y creer es poder».

Si se crea este favorable entorno, lo que nos espera será lo deseado. Un entorno dónde respeto y libertad estarían por encima de todo y muy ligados entre sí: respeto, libertad de actuar, de decidir, de pensar, de emprender y de soñar. 

Sin respeto y libertad no hay evolución, al contrario, la sociedad y los hombres se empobrecen en lo material y en lo moral.

Giuseppe Tringali

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