Loco de alegría. Así es como se encuentra el torero Jos Ortega Cano despus de convertirse la pasada madrugada en padre por tercera vez, el primero de sus hijos biológicos, fruto de su relación con su novia Ana María Aldón. Tal y como les había anunciado el ginecólogo Luis Ignacio Recasens era más que posible que el parto se adelantara ya que estaba previsto para el próximo 27 de febrero. Pero la noche del viernes Ana María empezó a sentir los clásicos dolores de parto quedando ingresada en el hospital Ruber Internacional donde finalmente se le tuvo que practicar una cesárea. El niño, que ha pesado 3,600 kilogramos, está sano y es una belleza según palabras de sus padres que están sin parar de recibir las felicitaciones de sus seres allegados. Está previsto que Ana María y el pequeño Jos María, como quieren llamar al beb, permanezcan unos días en el Ruber hasta que se recupere de esa cesárea. Se da la circunstancia de que apenas 48 horas antes de que naciera su hijo, el torero estuvo ingresado en el hospital Ramón y Cajal por una subida de tensión. Pasó esa noche en el centro hospitalario acompañado por uno de sus hermanos mientras Ana María se quedaba en casa ante la inminencia de su parto. Por suerte el pequeño Jos María aguantó a que su flamante padre volviera a casa.