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Blogs Enciende y Vámonos por Rosa Belmonte

Momentazo Campos vs. Momentazos Belén

Rosa Belmonte el

Estar metro y medio de Belén Esteban es igual que estar viéndola en televisión. Al menos yo le hablo a la tele, aunque no me conteste. Y Belén contesta lo que le sale de las narices, así que da un poco igual. Una esperaba ver algún momento Belén mientras la gente le preguntaba qué había sido de su naricita, con qué hombre había vibrado más (anda que el “experto en vibraciones”…), si los homosexuales deben adoptar niños, qué piensa de los inmigrantes o la tabla del nueve, a la que se lanzó sin ningún pudor (todo ese que tiene con el sexo o su marido).

 

 Primero envarada y luego más suelta, y sobre todo, enfadada, Belén fue mejorando. La Belén enfadada es la mejor Belén (y la que cuenta cosas). Del público destacó la señora que insistía en lo bueno que estaba su representante y en si no se había acostado con él. Y el profesor de Guadalajara. A Belén le van muy bien, como némesis, los profesores (para el documental se entrevistó a una profesora de literatura que dijo las cosas más interesantes y duras). El profesor le recriminaba ser ejemplo de sus alumnos, que creen que no hay que estudiar, que se puede ser Belén Esteban (que prueben a ver, que parece fácil). Ella le preguntó la edad de sus alumnos.11, 12,13, dijo. “¿Y qué hacen viendo Sálvame? Mi hija ve Camp Rock y Hanna Montana”. Que los niños no tienen que ver Sálvame.

 

 Pero por mucho que Belén fuera la protagonista, en realidad fue María Teresa Campos la que, inopinadamente, tuvo su momento cuanto criticó al animador de público. Es verdad que lo hizo justo cuando la gente había aplaudido espontáneamente a Belén (enfadada) en una de sus respuestas, pero la carga era otra. “Te vas a quedar sin trabajo porque el público está superadiestrado”, le soltó a Pepe. Por un lado, puede tener razón porque el oído del espectador está hecho a los puntos y a las entonaciones de quien habla, independientemente de que haya animadores o no (y de lo que se suelte sea una idiotez). Pero a lo que iba es a la sorpresa de semejante rebote por parte de la Campos. El momentazo, en lugar de venirme de frente me vino por la izquierda.

 

Aunque momentazo el otro rebote, el de TVE por tirar de Tengo una pregunta…. Habiendo estado en los estudios Buñuel con Lorenzo Milá y en el plató de Telecinco, lo de Belén es entretenimiento puro (no tengo muy claro si más en el plató o más en el sofá). Que no creo que haya que explicarlo. No digo que sea una parodia pero, vamos, cuando miraba al drag de sombrero (que iba en calzoncillos con todo el paquetón resaltándole) la cosa estaba más cerca de una parodia tipo Saturday Nigh Live que de algo que pueda molestar a TVE. Pero si sólo el título (España pregunta, Belén responde)… España, nada menos…

 

Lo que más me toca, lo del jurado, que también pone el toque (y el cuajo) de diferencia con Tengo una pregunta… Y aquí me pongo a los pies de los caballos (no sólo los de Hispania). Lo de decir si miente o no, pues es que me siento incapaz de ser Tim Roth en Miénteme. A veces se podía parecer a Lluvia de estrellas y a veces a Miss España (me sentía como el embajador ruso que preguntaba por Rusia y ponía cara de idiota con la respuesta). Bueno, es muy divertido. What else?, que diría Clooney.

 

(“Vamos a hacer un 15”, se oía en el plató antes de empezar el programa. Bingo)

Televisión
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