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Blogs Protocolo y etiqueta por Maira Álvarez

Margallo, Protocolo y terrorismo

Maira Álvarez el

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Estoy atónita, triste y enfadada. E imagino que a vosotros mi estado de ánimo no os importará, pero sí la causa, y que este estupor, tristeza y enfado es el mismo que compartimos todos los compañeros que nos dedicamos al  protocolo.

Hoy hemos sido públicamente insultados desde la arrogancia y la ignorancia por nada menos que el Ministro de Asuntos exteriores en funciones, José Manuel Margallo. En una entrevista que ha concedido esta mañana en Espejo Público (Antena 3) ha tenido a bien comparar el protocolo con el terrorismo.

Transcribo literalmente la conversación mantenida entre los periodistas y Margallo.

 

Periodista: lo normal es que ustedes estuvieran compartiendo mesa sin un casco azul en medio poniendo orden.

Margallo: Esto es un problema de protocolo. Ya sabe usted que la diferencia entre el protocolo y un grupo terrorista es que con un grupo terrorista se puede negociar de vez en cuando, con los de protocolo no.

(risas)

Margallo: A mí me sentaron exactamente en medio y yo me senté donde me dijeron.

Periodista: También se dice que el protocolo mira la manera de facilitar las cosas, ¿no? Para que todo el mundo sepa lo que tiene que hacer

Margallo: Bueno… eso es la diplomacia. El protocolo es donde se sienta uno para hacer eso que usted dice, que es lo importante.

 

En el Top Ten de comparaciones odiosas o absurdas todos recordamos lo de “no mezclar churras con merinas” “las peras son peras y las manzanas, manzanas”… Pues para mí ésta desafortunada metáfora se lleva la palma.

  1. Que una autoridad política nacional desprestigie así una herramienta de comunicación tan importante me parece lamentable
  2. Los responsables de protocolo no son seres perversos que hacen de “Juego de Tronos” y el sentar a la gente donde no quiere su pasatiempo favorito
  3. En los tiempos tan delicados que vivimos, sobre todo viendo lo cercano que está todavía el atentado de Bélgica, que el señor Margallo se atreva a jugar con el terrorismo me parece de una gravedad terrible.

 

Señor Margallo:

me permito la osadía de dirigirme a usted en primera persona, invitándole a desdecirse. Dicen que rectificar es de sabios. Usted es el primero que necesita a diario de los profesionales de protocolo y sabe que sirven para mucho más que “para decirle donde sentarse”.

Le aseguro, señor Ministro, que hemos estudiado lo indecible.

Que sabemos de leyes, de diplomacia, de cambios de legislaturas, de banderas, presidencias y precedencias.

Entendemos de egos y vanidades humanas (vaya a ser que a un Excelentísimo Señor no se le nombre como tal y se le suba el colesterol).

Que tenemos un poco de psicólogos, de abogados, de detectives y de confesores.

Somos poseedores del arte de improvisar para resolver sus olvidos, desconocimientos y meteduras de pata.

Que muchos de nosotros sabemos bien del arte de hacernos los mudos y los sordos ante ciertos comportamientos o comentarios.

Que sabemos que usted sabe que cuando un evento sale bien, es gracias al equipo de protocolo.

 

Firmado: una mujer, madre, periodista, protocolista… JAMÁS UNA TERRORISTA

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