Miriam Clegg es una española casada con el viceprimerministro británico y líder del Partido Liberal, Nick Clegg. Y ayer pidió la palabra en un acto celebrado en Londres para defender las políticas de permisos de paternidad impulsadas por su marido en el Gobierno de Cameron. Con una expresión muy española: cojones. Afirmó Miriam Clegg que “el cuidado de los hijos no afecta al nivel de testosterona” y que “los hombres que tratan a sus mujeres como seres iguales son quienes tienen más cojones”.
Totalmente de acuerdo con Clegg, también con su provocación. Cierto que son los hombres igualitarios los más seguros de si mismos y de su masculinidad, he escrito sobre esa cuestión en Mujer Hoy (por ejemplo, en mi último artículo, “Su lado femenino”).
Y oportuna su provocación sobre las políticas de permisos de paternidad. Porque una de las últimas grandes asignaturas pendientes en la igualdad de hombres y mujeres es la relativa al cuidado de los hijos. Y ahí el obstáculo principal sigue siendo el cultural, el que cuestionó Miriam Clegg con el español “cojones”.
