Preysler y Vargas, en casa de Iglesias

No hay año que Isabel Preysler no consiga reunir a sus cinco hijos en torno a la mesa de Nochebuena. Primero en su casa de Arga, en El Viso, luego en Puerta de Hierro y ahora en Miami, el caso es compartir esa noche con sus seres queridos entre los que por supuesto también están su madre, su hermana y sus sobrinos. Tremendamente familiar y muy casera, Preysler en esto es igual que cualquier otra madre: su preocupación es que todos se sientan bien y que nadie se pierda la reunión. Por eso esta Navidad repetirá experiencia en Miami, en casa de su hijo Enrique Iglesias, sólo que con la novedad de que ahora también les acompaña Mario Vargas Llosa, que ya está totalmente integrado en la familia de su novia. Junto a los nietos de Isabel, el escritor peruano pasará una noche muy diferente a las que ha tenido durante estos últimos cincuenta años de matrimonio con Patricia. Evidentemente la ruptura no es plato agradable para nadie y aunque haya sido él quien decidió emprender esta nueva vida qué duda cabe que las fechas son complicadas y más cuando hay hijos y nietos de por medio a los que ese día no podrá entretener con sus historias. Rodeado por el calor de los Preysler y especialmente por su pareja Isabel, Vargas Llosa será el invitado de honor del cantante Enrique Iglesias que está feliz sólo de saber que su madre también lo es. A pesar de los miles de kilómetros de distancia, Enrique sienta auténtica adoración por ella y de ahí las largas conversaciones telefónicas que mantienen casi a diario.