Escassi y Sonia Ferrer, otra crisis superada

No querían confirmar ni desmentir que se habían separado y eso que hasta salieron fotos en las revistas de cómo el jinete Álvaro Muñoz Escassi abandonaba la casa de su novia Sonia Ferrer cargado de maletas. Lo único que tiene es ropa y de ahí que no hiciera falta un camión de mudanzas sino simplemente el maletero del coche para terminar con una historia que surgió en el trampolín de una piscina a la que se tiraron conscientes d elas consecuencias que iban a tener. Entre otras cosas el final del noviazgo de Escassi con su pareja de hacía tres años y el divorcio de Sonia con el cirujano plástico italiano Marco Vricella, padre de su única hija. Pues el silencio de Sonia y Álvaro sólo respondía a que ni ellos mismos sabían si iban a superar una crisis, que no es la única ni será la última, que era de dominio público. Pasadas apenas 48 horas la pareja se reconciliaba mientras en el programa “Deluxe” salía una chica cargada de piercing dispuesta a contar cómo el guapo jinete y ahora empresario había intentado ligar con ella. Para entonces Sonia y Escassi ya estaban juntos, revueltos y viviendo eso tan intenso que es la reconciliación y por la que vale la pena pelearse de vez en cuando. La suya tiene toda la pinta de ser una historia con muchos dientes de sierra y con muchos silencios cada vez que haya un problema. Ya veremos.