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El Madrid es el espejo de la UEFA, otros rompen el cristal

El Madrid es el espejo de la UEFA, otros rompen el cristal
GRA104. MADRID, 01/10/2017.- El presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, durante su intervención en la Asamblea General Ordinaria de Socios de la entidad celebrada hoy en el Parque Ferial Juan Carlos I, en Madrid. EFE/Paco Campos
Tomás González-Martín el

La UEFA prepara un Fair Play financiero más duro, porque no se pueden permitir los derroches del City, del PSG y del Barcelona. El plan previsto por el Fair Play Financiero de la UEFA para el futuro inmediato es permitir a los clubes un gasto de cien millones de euros más que las ventas de jugadores de cada temporada. Por ejemplo, si un equipo vende futbolistas por valor de 50 millones, podrá comprar por valor de 150. La UEFA prepara un Fair Play financiero más duro, para no permitir los derroches económicos del Manchester City, del PSG y del Barcelona.

Los dos primeros clubes mencionados, a expensas de los caprichos de jeques como el que arruinó el Málaga, constan en la UEFA con datos peligrosos: el PSG (-311 millones de euros), Manchester City (-246 millones de euros). Y el Barcelona, que aún es de sus socios, consta con un -170 millones de euros. Cualquier fallo les hundiría en la miseria, especialmente a los dos equipos con jeques al mando, porque gastan lo que no consiguen en sus ingresos.

El ejemplo de gestión en el máximo organismo del fútbol europeo es el Real Madrid. Solo Mónaco, Borussia Dortmund y Olympique de Lyon tienen mejores porcentajes económicos que el Real Madrid, aunque mucho menores en dinero absoluto, pero son entidades vendedoras de futbolistas.

El club madrileño tiene las mejores cuentas de Europa entre lo grandes. Y con mucha diferencia. No está en negativo en sus números, como esas cifras espantosas que presentan PSG, City y Barcelona. El Madrid se encuentra en valoración positiva. En números óptimos, con el signo +. El último control económico desvela 92 millones en gasto de jugadores y 139 millones ingresados por la venta de futbolistas. La dirección de Florentino Pérez se ha convertido en la referencia para cumplir la nueva normativa de la UEFA, que amenaza con dejar a los clubes fuera de las competiciones europeas en un futuro por los claros desfases en el Fair Play Financiero.

Desfase presenta el PSG (-311 millones de euros), que ha fraccionado hasta 2019 su fichaje de Mbappé, que vale 180 millones, porque sumado a los 222 millones pagados por Neymar suponen una cifra que se acerca al 90 por ciento del presupuesto. El Manchester City (-246 millones de euros) también rompe su presupuesto con los pagos de fichajes de defensas a precios de oro. Y el Barcelona (-170 millones de euros) tiró la casa por la ventana con Coutinho (160 millones) y Dembelé (135) para que Bartomeu mantuviera el puesto y el pescuezo tras la fuga de Neymar por esos 222 millones. Pero los azulgrana convirtieron los 222 millones recibidos en un gasto enorme. Solo en esas dos adquisiciones alcanzaron los 300 millones. Y luego han contratado a Paulinho por 42 millones y al colombiano Mina por 36 millones. Se acercan a una inversión de 400 millones. Todo, para superar el golpe de Neymar y para reaccionar ante las dos Champions obtenidas por el Real Madrid sin gastar dinero, con más ingresos en ventas que en fichajes. Los tres clubes del gasto loco están muy lejos del potencial económico que atesora el Real Madrid. Su filosofía, la de los tres acusados, es jugar al filo de lo imposible.

La entidad del Bernabéu traerá uno o dos grandes jugadores este verano. Y cumplirá de sobra con el Fair Play sin problema. Porque se desprenderá de otros jugadores con cartel. Es la consecuencia de llevar el club como una empresa. Otros lo llevan como un capricho. Sin justificar pagos. Levantan el teléfono, piden un cheque y pagan un gran fichaje sin justificar presupuestos.

Hasta ahora, PSG y City han tapado sus vergüenzas llamando a la UEFA y cumpliendo el Fair Play vendiendo o cediendo jugadores para cumplir lo que les piden. Tienen carta preferencial en el Fair Play, con línea directa. Y eso no puede ser. El PSG ha vuelto a caer en cuartos de final de la Copa de Europa ante el equipo que mejor gestiona y ahora debe vender para cubrir sus cuentas oficiales.

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