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Blogs La polvera por Teresa de la Cierva

Verde que te quiero rosa

Verde que te quiero rosa
Teresa de la Cierva el

“Las cosas no son siempre lo que parecen: a veces tienes que besar a varias ranas antes de encontrar a tu príncipe!”.

La frase de Poppy King, fundadora de Lipstick Queen, me viene que ni pintada, y nunca mejor dicho, para hablaros de los labiales que son de un color, pero pintan de otro.

Es el caso de la famosa barra verde marroquí que convierte la boca, por arte de (casi) magia, en rosa.

 

 

La “varita” la tienen unos colorantes sintéticos que se encuentran en unas condiciones de escasísima humedad, y por eso son incoloros. Cuando entran en contacto con la humedad de los labios y del aire, reaccionan, dando lugar a un tono que va del rosa al rojizo, según sea el ph de cada piel.

El color es como el de un tinte que potencia el tuyo natural, se mantiene durante todo el día (a veces, hasta la mañana siguiente) y es a prueba de los besos más apasionados!!!

A decir verdad, no favorece a todo el mundo (y tiro la primera piedra), pero tiene una legión de fans (entre las que no me cuento) como Sara Carbonero, Vanesa Romero (ya la habéis visto en la foto) o Eva Gonzalez, entre otras.

Pero la razón de este post no es hablar de esta barra, que está ya más vista que el tebeo. Es contaros que ya no hace falta “bajarse al moro” para hacer acopio de ella!

Tenemos ya en España Frog Prince, una barra tan verde como la rana que le da nombre,  que se convierte en rosa para que puedas besar a a tu príncipe azul. Y ademas, está enriquecida con manteca de karate y vitamina E (23€ en Isolée)

 

 

Y no es la única. La firma Camaleón (bien escogido el nombre, si señor!) lanza unos lápices (chubby) con 4 colores “de mina” diferentes, que también cambian de tonalidad al entrar en contacto con los labios.

 

 

-La mina amarilla convierte los labios en un rosa muy natural

 

-La verde, en rosa fucsia.

 

 

-La gris antracita, tira a lila.

 

 

-Y la roja, a coral

 

 

Es suficiente con una sola pasada del stick sobre los labios para lograr un efecto permanente y duradero. Pero si se desea intensificar el color, se puede repetir la operación. 7,90

 

Y el lápiz más intrigante -y para mi, el más favorecedor de todos- es el nuevo Noir Révélateur de Givenchy (ya existía una versión anterior, pero este es mejor, si cabe).

 

 

Del negro de este stick, nace un color malva o ciruela en la boca, como el de unos labios mordidos, que queda ultra sexy, mega sensual.  Y puede aplicarse solo o sobre cualquier otra barra de labios, para volverla más oscura, más densa. 35€. 

 

Maquillaje

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