¿Tu empresa te mima?

Tras un partido de pádel truncado por lesión de una de las jugadoras, decidimos aprovechar la brillante mañana del domingo tomando el aperitivo en la terraza del bar mientras esperamos que el marido de la lesionada venga a buscarla.

Comentando los milagros de la fisioterapia, Elena nos cuenta que en su oficina, todos los viernes un fisioterapeuta proporciona masajes terapéuticos de espalda en sesiones de media hora, para corregir los problemas posturales fruto de tantas horas frente al ordenador durante la semana. Como suman poco más de veinte empleados, en general todos los que quieren pueden disfrutar de su media hora de deleite que les deja como nuevos para el fin de semana.

Poco a poco las empresas van incorporando beneficios sociales para mimar a sus trabajadores, facilitarles la vida o mejorar la conciliación. Muchas grandes corporaciones ofrecen comedor, gimnasio, guardería o incluso servicio de lavandería.

Aunque las compañías de menor tamaño no pueden permitirse estas instalaciones, hay otros pequeños servicios al alcance de presupuestos más modestos, como el fisio de mi amiga los viernes, yoga en la oficina en la hora de comer, fruta fresca y galletas de fibra para hacer breaks mañaneros más sanos, incluso futbolín o videojuegos cuando hay mayoría masculina entre los empleados. Uno muy bueno, al alcance de cualquiera, es la flexibilidad de horarios. O la posibilidad de trabajar ocasionalmente desde el propio hogar (aunque antes de implantar fórmulas de teletrabajo, las empresas deben analizar y planificar todas las implicaciones que suponen en el conjunto del equipo).

Todas son magníficas ideas, pero no olvidemos que los principales factores que favorecen la fidelidad de los trabajadores son el buen ambiente laboral, la formación continua, la relación personalizada entre empresa y trabajador, un liderazgo claro, la carrera profesional y la retribución justa basada en los méritos. Sin estos elementos de base, es inútil añadir guindas a la pirámide del bienestar laboral.

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