ABC
| Registro
ABCABC de SevillaLa Voz de CádizABC
Blogs Enciende y Vámonos por Rosa Belmonte

Ciudadanos y telespectadores

Rosa Belmonte el

Tania, reportera de El Método Gonzo.


Porque Cajón Desastre es un título que ya está pillado como programa de televisión porque si no vendría que ni pintado para El método Gonzo. ‘La vamos a liar’, anunciaba bravucón en las promos Fernando González, Gonzo, ese chico tan majo y resultón. Y parecía que su nuevo espacio en Antena 3 iba a ser una especie de Proteste ya (su sección en CQC) a lo grande. No va a quedar títere con cabeza y tal. Pues nada. Los pollos, de momento, son pollitos. 


Además de resultar demasiado largo, no queda muy claro cuál es el género del programa. Eso no es malo por sí mismo, sólo si el resultado es aburrido. De bostezo doble. A ver. Plató. Presentador en el plató. Entrevistas en el plató. Monigotes. Un perro de trapo (una mezcla entre El follonero y el chucho de Infelices para siempre). Y, Dios, Curro de la Expo (como si no tuviéramos bastante con la actual, nos recuerdan las pasadas).


 Una señora con buena pinta que protesta por el hambre en el mundo recogiendo comida de la basura (‘Mira, esto no está caducado’) y comiéndosela.  Y que va al plató también. Unos vecinos de Rincón de Bonanza, una pedanía de Orihuela que protestan porque cruzar la Nacional es un peligro y no tienen semáforo. Pequeña Vanesa, la hija de Manolo Escobar, que ha abandonado Cuatro, habla con la alcalde, que está encantada (la culpa la tiene Fomento que no permite poner los semáforos, oye). De los sucesos se encarga Alfonso Egea (lo hacía en Channel). 


Hay un señor calvo con perilla graciosillo en la redacción que cuenta que unos vecinos protestan por un mercadillo (y él canta, saleroso,  la venta de bragas). Gonzo habla por teléfono (después de promocionar GPS) ¡con el apoderado de José Tomás! y le pregunta si alguna vez podrá tener en el plató al torero. Sí, hijo, un día de estos. 


 Lo de GPS, by the way, tiene su miga. Analizaron los mofletes de Ana Obregón (indican necesidad de protagonismo). Y también el rostro de José Tomás. Una y otro, sin solución de continuidad. ¿Y qué psiquiatra salió? José Cabrera, of course.  Entre otros especialistas.


 El método Gonzo, como Rajoy, tiene su niña, Tania. Un cebo (de momento, encantador) que echan a los políticos (Arenas, la Vice…) o a Florentino Pérez, que dijo estar encantado de que Cristiano Ronaldo viniera al Madrid.  Oh, oh, se le ha escapado, bramaron. Y van y se traen al plató a Manu Sánchez para hacer comentario de texto del presunto desliz de ex presidente. La niña, de momento, no molesta, lo que ya es bastante. Aunque ¿qué necesidad habrá de chiquillas?


El método Gonzo se había presentado como un programa que abordaría asuntos que preocupan a los ciudadanos. Estoy empezando a dudar si soy ciudadana.


Bonus Track. La única razón por la que veo CSI es por Sara y Grissom.  Por esa relación servida en migajas, en momentos íntimos que casi son espejismos. Y siempre, golpes de efecto, desde aquel primer día en que sólo estaban juntos en una habitación. El final del episodio de ayer (Ídolos caídos, séptima temporada) vale por todo el metraje y por varios capítulos (lástima que lo hubieran reventado en las promos). Ahora, a esperar el siguiente momento Sassom, que suena un poco a Babylon 5 (a Z’ha’dum, claro).

Hemeroteca
Rosa Belmonte el

Entradas más recientes