ABC
| Registro
ABCABC de SevillaLa Voz de CádizABC
Blogs Jugar con Cabeza por Federico Marín Bellón

El Mundial de Ajedrez se pone serio

El Mundial de Ajedrez se pone serio
Federico Marín Bellón el

Después de dos partidas apasionantes, a la tercera llegó la aburrida, aunque como ocurre tantas veces, la superficie escondía toneladas de ideas que el público no pudo ver. Caruana volvió a abrir de peón de rey, Carlsen repitió con la siciliana y Fabiano, dentro de su plan Rossolimo, se desvió en la primera salida de la carretera elegida el primer día, lo justo para esquivar los análisis. Fue un juego de nervios y faroles que a veces recordaba a una partida de póker, y que tuvo dos fases muy distintas. Hasta la jugada 15, el aspirante tuvo una posición más que prometedora. En esa zona complicada entre la apertura y el medio juego, cometió alguna imprecisión y el campeón se encontró en el vestíbulo del típico final que le gusta apretar. La ventaja era tan minúscula, sin embargo, que no fue suficiente para animar a la grada. Con las terceras tablas seguidas, el duelo sigue igualado: 1,5 a 1,5

Carlsen apenas ha sufrido con negras, salvo por no ser capaz de rematar la primera partida. Fotos: World Chess

El equipo americano hizo bien su trabajo. Como los tripulantes de un submarino, taparon todas las fisuras y apretaron los dientes, confiados en que Carlsen no les sorprendiera con algún torpedo. Caruana tenía el típico planteamiento que le gusta a Carlsen, con varias jugadas buenas, casi intercambiables, que le permitían mantener la típica ventaja leve que las máquinas estiman en torno a +0,5. Contra el campeón eso es toda una proeza. Pero quizá por ese carácter difuso, el italoamericano no anduvo fino y dejó escapar dicho margen, que a ratos pudo redondear casi en +1, siempre teniendo en cuenta que dichas evaluaciones no son tan útiles en posiciones de ese tipo, con tacto factor humano a considerar.

Posición crítica de la partida. Fabiano Caruana jugó 15 Ad2. Era algo mejor el cambio de torres, según los módulos y los grandes maestros

Peter Svidler comentó en Chess24 que justo la jugada 15, que no quiso calificar como un erro, marcó el curso de la partida. Probablemente a Fabiano se le escapó la respuesta de su rival, porque si hubiera cambiado torres justo en ese momento, «podría haber sido una historia diferente». Ese fue el punto de inflexión de la partida. Carlsen, que hasta ese momento había flojeado un poco, en opinión de David Antón, se sintió liberado y cambió el signo de la partida. Como señalaban Pepe Cuenca y David Martínez, el cambio de tendencia era evidente, pese a que objetivamente la situación fuera igualada sobre el tablero.

En todo caso, en el ambiente se palpaba que Magnus entraba en modo máquina, con la ventaja psicológica como principal argumento. Por suerte para el aspirante, no es de los que se hunden a la primera y aguantó sin excesivas dificultades. Simplificó todo lo necesario y braceó hasta alcanzar la orilla en la jugada 49. Con Carlsen ya se sabe que el camino nunca será corto. La frase más repetida por parte de los comentaristas en las últimas 30 jugadas era «probablemente siguen siendo tablas».

Fue por tanto una jornada de transición. Será interesante comprobar quién está mejor preparado en la siguiente y si Caruana se atreve a repetir su novedad, si es que se lo permiten. Según declaró Susan Polgar, que tiene sobrada expriencia en duelos por el título mundial, justo aquí es donde «Caruana y su equipo deben encontrar una solución», después de conseguir «excelentes posiciones en las últimas dos partidas», pero nada más. «¿Qué fue mal?, ¿cómo mejorar? ¡Para eso tienes un equipo!».

Así fue la tercera partida: 

Fabiano Caruana 0,5 – Magnus Carlsen 0,5

Ajedrez

Tags

Federico Marín Bellón el

Entradas más recientes