Cuando empezamos a organizar un viaje en coche una de las cosas que debemos tener en cuenta es la hora a la que saldremos, ya que del recorrido y su comodidad dependerá que podamos disfrutar de las vacaciones desde el momento en el que entramos en el coche.
La organización de un viaje, sobre todo cuando tenemos hijos pequeños, es esencial para poder atender a cualquier imprevisto que pueda surgir, por ese motivo atender a la hora de salida es indispensable.
Evitar las horas punta es siempre lo más recomendable, ya que si tratamos de no viajar cuando la mayoría el viaje será mucho más cómodo. En primer lugar, llegaremos antes gracias al menor tráfico. Además, la conducción será más tranquila, haciendo de nuestro viaje una experiencia más segura. Y finalmente los niños estarán también más relajados al notar que el tráfico fluye más fácilmente.
No viajar durante las horas centrales del día también debe ser una pauta para nuestras vacaciones. Son las horas en las que más calor hace y al coincidir con la digestión tras la comida de medio día, puede perjudicar a la conducción y a la comodidad del resto de viajeros, especialmente los niños.
Un error muy típico es salir cuando creemos que los niños van a estar dormidos. En muchas ocasiones, al sacarles de su entorno habitual, su rutina de sueño se ve alterada, por lo que no debemos pensar que dormirán durante el viaje. Llevar algún juguete o música para mantenerles entretenidos, como hemos comentado en otras ocasiones, es siempre recomendable.
Otra buena idea es aprovechar el recorrido para organizar excursiones en nuestro destino. Ya sólo queda disfrutar del viaje en familia.
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