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Blogs Laboratorio de Estilo por María Luisa Funes

El nuevo hotel Lutétia

El nuevo hotel Lutétia
María Luisa Funes el

Tras tres años cerrado por reforma, este verano ha abierto de nuevo el famoso Hotel Lutétia de París, un emblemático establecimiento que necesitaba una actualización urgente. El Lutecia, como decimos en España, abrió en 1910 como lugar de hospedaje para los mejores clientes de su vecino, el entonces -y ahora de nuevo- exitoso gran almacén “Le Bon Marché”.

Situado en el barrio de Saint-Germain, la Rive Gauche, concretamente en el Boulevard Raspail, se encargaron las esculturas de su fachada de estilo Art Nouveau, con flores y ramas de vid, a Paul Belmondo, padre del famoso actor Jean-Paul Belmondo.

Después de sufrir cambios y “funciones” durante las dos Guerras Mundiales y servir de centro de reunión de familiares perdidos en manos del General de Gaulle, se convirtió en un eje crucial para escritores, pintores, filósofos y artistas. James Joyce escribió el “Ulises” allí. André Malraux y Andre Gide -entre otros- escogieron el Lutecia como centro de reunión y encuentro.

Pablo Picasso y Henry Matisse vivieron en sus habitaciones largos periodos de tiempo, mientras que en los 50, se convierte en centro de reunión y estancia de políticos y empresarios importantes. De Gaulle pasó allí su noche de bodas y François Mitterrand visitaba con frecuencia a escritores conocidos suyos.

Pierre Bergé, pareja personal y profesional de Yves Saint Laurent durante muchos años, vivió más de un lustro en el hotel, decorando una suite a su gusto con su mobiliario y obras de arte.
 Durante los años 80, Sonia Rykiel rediseñó el hotel, aunque desde hace años, probablemente aquella reforma le quitó su carácter intemporal para siempre y con los años, quedaron espacios pasados de moda y algo casposos.

Ahora que ha vuelto a abrir con un toque moderno que lo asemeja a muchos otros hoteles, quizás Serge Gainsbourg, otro de sus habituales de antaño, se habría desilusionado. Una parte del “sabor” del gran Lutecia se ha perdido en pro de la comodidad y los avances técnicos, pero el que tuvo, retuvo.

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