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Blogs La fiebre del oro(.com) por Jon Oleaga

Los nómadas digitales, una nueva moda de Silicon Valley

Jon Oleaga el

Una de las modas que nos llegan de Silicon Valley, son el nuevo movimiento de los nómadas digitales. Movimiento, que cada vez va tomando más fuerza en España y en todo Europa. Estos nómadas digitales, trabajan de forma independiente, sin una sede fija, viajando por el mundo, según les es conveniente. No se trata de nada nuevo, siempre ha habido personas que van trabajando de un lugar temporal a otro, como los empleados de las estaciones de esquí, o lugares de verano, que trabajan intensamente sólo parte del año. Ahora, el trabajo digital, en remoto, ha hecho que otro tipo de empleo, no sujeto a un espacio físico, dé rienda suelta a un trabajador más cualificado.

Buffer, la conocida herramienta utilizada por los responsables de social media de medio mundo, con cerca de millón y medio de cuentas. Es la primera startup de éxito que no tiene oficina física, cada empleado vive en el lugar que le place, y trabaja desde allí. Leo Widrich, su afamado cofundador, es asiduo de lugares de coworking, desde donde organiza su empresa en remoto. El agosto pasado nos explicó, cómo conseguía controlar su empresa de 65 empleados, sin estar físicamente en el mismo lugar, utilizando herramientas como Slack o Skype, y cómo hace dos años decidieron abandonar la oficina, a favor de que cada uno trabajara desde donde quisiera. Según nos contó, así eran capaces de reclutar mejor talento, distribuido por todo el mundo. Y todo no acaba aquí, todos los sueldos y los nombres de sus empleados son públicos en su página web. Además, los sueldos se pueden calcular automáticamente, según el lugar de residencia, adaptándose al coste de la vida de la ciudad. Una vez al año todo el equipo se va de viaje, para crear cohesión y tener, así, un contacto físico.

Buffer es un caso especial, pero es una de las primeras empresas de nueva creación, que creen que no es necesario que los empleados estén presencialmente en la empresa. Otras, en cambio, dan permisos de semanas o incluso meses para trabajar remotamente. Así, por ejemplo, si vives en Alemania y eres un fan del surf, puedes ir a trabajar a Fuerteventura durante unas semanas, y disfrutar de tu deporte favorito trabajando desde un espacio de coworking.

La libertad para viajar y trabajar desde cualquier lugar, hace que muchos empleados vean con mejores ojos trabajar en empresas, con un gran compromiso con la conciliación entre la vida personal y profesional de sus trabajadores.

Existen libros, videos, blogs y eventos, que hablan sobre el movimiento nómada digital. Empezó pequeño, con Tim Ferriss y su best seller “La semana laboral de cuatro horas”, hablando sobre cómo usar el mail para poder trabajar mientras se viaja. Es cierto, que trabajar cuatro horas a la semana es difícilmente sostenible, pero usar herramientas de comunicación como Skype o Slack, para trabajar remotamente, es muy factible.

Trabajar desde tu destino de vacaciones, y no estar limitado por los 22 días de asueto anuales, puede ser el sueño de muchos. El cambio cultural llega, pero seguramente tardará en una entramado laboral como el español.

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