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Blogs French 75 por Salvador Sostres

Este chico Garicano

Salvador Sostres el

Este chico Garicano ha escrito una serie de tweets sobre la fortuna de Amancio Ortega, comparando lo que su fundación da a la beneficencia con las aportaciones caritativas de Bill Gates. Y le dice: “Sr. Ortega, el dinero está muy bien ganado y merecido -todos lo admiramos. Pero ¿no valdría la pena hacer algo con él?”.

Este chico Garicano, ¿quién se ha creído que es?

Amancio Ortega puede hacer lo que le dé la gana con su dinero y no tiene que aguantar lecciones de nadie. Lo que ha hecho el señor Ortega para ganar su fortuna es mucho más valioso, útil y caritativo que lo que puedan hacer millones de oenegés. La verdadera beneficencia es crear puestos de trabajo y riqueza. ¿Qué ha hecho este chico Garicano que pueda compararse a la inmensa obra de Amancio Ortega? ¿De dónde saca el nervio para ir a decirle lo que tiene que hacer con su dinero?

Inditex ha vestido a los pobres para que no lo parecieran tanto, y a muy bajo precio. Ha empleado a cientos de miles de personas. Ha pagado impuestos, ha creado riqueza en España y en el mundo entero. Y ahí va Garicano con sus recomendaciones. Si este chico llega a ministro, ¿qué más va a preguntarnos? ¿Qué otra explicación sobre nuestra vida privada le vamos a tener que dar?

Y éste era el liberal.

A los empresarios hay que darles las gracias y dejarles trabajar. A los empresarios hay que ponerles facilidades y dejarles en paz. Una empresa, con sus impuestos y sus salarios, es siempre una obra de caridad, que significa amor, una obra de amor dedicada a la gente y a la sociedad. ¿Qué más quiere este chico Garicano que don Amancio Ortega haga con su dinero? ¿Cuántas fábricas, tiendas y empleados más tiene que tener Inditex para que Garicano considere que es ya digna de su altura moral?

Si ésta es la promesa económica de Ciudadanos, no entiendo por qué no se funden en alianza electoral con Podemos, que también creen que saben mejor que nosotros cómo gastar nuestro dinero. ¡Sería sensacional! Y de número tres, Jordi Évole, para completar la farsa.

No hay obra de caridad que se pueda comparar a la importancia de una empresa, a su vigor económico, político y social. Que esto no lo sepa un comunista es normal, porque por eso es comunista. Pero que este pobre Garicano caiga en estos populismos tan extremos es mucha más vulgaridad de la que podemos soportar.

El señor Ortega es el hombre más rico del mundo y este chico Garicano lo que tiene que hacer es callar. Calla, Garicano, calla. Cállate y deja de molestar.

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