Mi querido compañero de ABC papel y abc.es Fernando González Urbaneja ha provocado una encendida polémica con sus críticas al uso por parte de Telecinco de Sara Carbonero en el Mundial de fútbol. Unas críticas realizadas por Urbaneja en un curso sobre Mujeres y medios de comunicación, organizado por la Dirección General de la Mujer de Madrid y la UIMP en Santander, y en el que yo misma he participado.
Algunos participantes, Esther Esteban, Isabel San Sebastián, Carmelo Encinas, Flora Sáez, yo misma, continuamos discutiendo ayer sobre esta cuestión y por eso acepto la invitación de un internauta, M. Pérez en el post anterior, para abordar lo que él llama este “frivolitema”.
En el debate de Santander hubo dos posiciones muy diferenciadas, la mayoritaria, para la que tanto Telecinco como Sara Carbonero tienen perfecto derecho a ese planteamiento de trabajo y hacen lo correcto, y la minoritaria, en la que me encontraba, para la que el papel de Sara Carbonero nos parecía, nos parece, cuestionable y, sobe todo, negativo para las mujeres.
Y no porque un periodista no pueda entrevistar a un familiar, Iñaki Gabilondo, por ejemplo, entrevistaba recientemente a su hermano ministro y lo encontré correcto, sino porque un periodista debería tener cuidado a la hora de hacer espectáculo con su relación con el objeto de la información. No era el caso de Gabilondo, pero sí, tal como lo veíamos la minoría de Santander, el de Sara Carbonero.
Y que tiene, y esto es lo que menos me gusta, efectos negativos para el trabajo de las mujeres en los medios de comunicación y en el periodismo en particular. Nuevamente, se reproduce el eterno papelón, chica elevada al estrellato mediático en virtud de su belleza y de su relación de noviazgo con una figura popular. Al fin y al cabo, ¿qué nos queda del mundial desde el punto de vista periodístico? Muchos periodistas hombres destinados allí por su especialización en fútbol y una periodista mujer, que con seguridad sabe mucho de fútbol, pero que es enviada por su belleza y su noviazgo con el portero de la selección más que por sus conocimientos.
Eso sí, pierden las mujeres, pierden las periodistas que se abren camino en esta profesión con su trabajo y sus conocimientos, pero ganan Telecinco y gana Sara Carbonero que hacen audiencia y mucho dinero. ¿Y gana Iker Casillas? A eso último contestaremos a partir de las 22 horas
Mujeres y periodismo
