Ayer El País manipulaba descaradamente una encuesta. O, más directamente, lo hacía Metroscopia que avalaba el titular de El País con una impresionante tergiversación de los datos de una encuesta.
El País titulaba en portada lo siguiente:
“El voto del PP se hunde entre el desdén general por la política”
El problema es que tal titular no iba acompañado en páginas interiores de una estimación del voto, el dato que permite hacer afirmaciones sobre el hundimiento del voto o cualquier otra evolución de las intenciones electorales.
Iba acompañado, he aquí la lamentable tergiversación, de una suma de la intención directa del voto y simpatía. Y ambas cosas no son lo mismo que estimación de intención de voto, cosa para cuyo cálculo hay que añadir otros datos.
Y, claro está, esto no pueden saberlo la inmensa mayoría de lectores de ese periódico que no son sociólogos o politólogos. Aún peor, que son confundidos por el hecho de que Metroscopia presenta estimación de voto en las encuestas publicadas periódicamente en El País. Por lo que, a estas alturas, deben de estar asombrados, y seguramente contentos, de ver tal transformación del voto en tan solo un mes. Sin saber que están comparando cosas muy distintas y que no se pueden comparar.
En otras palabras, que la viñeta de más arriba, del conocido dibujante del mismo periódico, debería corregirse adecuadamente (“le he dicho derecha y usted ha puesto izquierda”) para resumir lo de ayer.
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