Me acosté ayer por la noche con el pensamiento de inaugurar este blog explicando por qué los vascos nos ponemos tan pesados con lo nuestro, por qué voy a dedicar el primer mes del blog a daros la murga con el asunto vasco una vez más. Y ya veis, esta mañana, la nueva bomba de ETA me ha puesto una lamentable ilustración a la explicación.
Porque es a esto, a los de la bomba y a quienes les sostienen y les excusan, a lo que se debe la murga vasca, esta enésima vuelta alrededor de la vasquez que aburre e incluso irrita a bastantes ciudadanos españoles, en muchos casos personas sensatas, comprometidas, nada pasotas. A los que entiendo, tanto que a veces me dan ganas de disculparme por volver de nuevo a la carga con lo de siempre, con el eterno problema vasco.
Pero cuando reivindicar tu españolidad es un acto de trasgresión desde que te levantas hasta que te acuestas, cuando por aquí la gente vive marcada por el miedo a los de la bomba, cuando los propios gobernantes nacionalistas dedican más energías a buscarles excusas que a perseguirles, entenderéis que insista con la murga vasca.
Cuando está en juego la libertad, merece la pena ponerse pesada.
la vasquez
