El Tramabús atropella a Podemos

Pablo Iglesias debería colocar una foto de él mismo en el Tramabús como líder que es de un partido con casos de corrupción. Si otros son corruptos y deben ser denunciados en el Tramabús por acusaciones de corrupción como las que pesan sobre dos concejales del ayuntamiento de Madrid, ¿por qué no Podemos y Pablo Iglesias? Porque los dos concejales podemitas están acusados de gastar nada menos que 50.000 euros en encargar dos informes cuya finalidad era buscar argumentos para denunciar contratos realizados por la corporación anterior.

Patética la intervención ayer de Manuela Carmena para justificar por qué no dimiten los concejales cuando ella y su grupo han exigido dimisiones fulminantes de los demás en casos semejantes.

Y más pronto que tarde tanto Podemos como C’s, partidos que se ha distinguido por exigir dimisiones inmediatas en el momento de la imputación y no en el del procesamiento o incluso condena como hemos defendido otros, tendrán numerosos casos como el del ayuntamiento de Madrid y buscarán excusas para no aplicarse su propia medicina. 

Habitualmente, la excusa suele ser que “no se trata de corrupción política”, excusa a la que Podemos ha añadido la de que “trataban de investigar la corrupción”. 

Y encontrarán otras hasta que decidan, que lo harán cuando se les acumulen los casos de corrupción, que vuelven a creer en la presunción de inocencia. 

Postdata: Emmanuel Macron ha tenido que probar su propia medicina sobre la corrupción  en sólo un mes, que es todo un récord  que trato en mi artículo de papel de esta semana (La posverdad de la derecha corrupta) . Veremos cómo afectan estos procesos a los “regeneradores” de la democracia en el futuro