“¿Dónde coño hay un pago del Santander a mí?” Es una de las líneas de defensa de Garzón en la película propagandística que le ha hecho Isabel Coixet. Y es que, como todos recordarán, él pidió dinero a Botín para los cursos de Nueva York y después cobró una gran cantidad de esos cursos, pero con cheques del organizador y no del patrocinador. Pues eso, “¿dónde coño pone que el dinero era del Santander?”. Cualquier juez haría ese razonamiento en su instrucción, no nos cabe ninguna duda.
Garzón y su defensora, Isabel Coixet
El País adelantaba ayer éste y otros extractos de las declaraciones de Garzón en la película. Isabel Coixet, rendida admiradora del juez, ha puesto sus dotes cinematográficas al servicio de su defensa, convencida como está de que los tres procesos abiertos contra el juez constituyen una conspiración.
Además del “dónde coño”, proclama el juez otras cosas:
“Aquí lo que ha pasado es que ya no da miedo ser corrupto. Porque lo eres y te siguen eligiendo, te siguen celebrando”. Y no, no se refiere a él y la película de celebración de Coixet, se refiere a los políticos.
“¿Cómo pueden atacar a las instituciones de esta manera? Al juez, al fiscal, a la policía, al Gobierno, a todos.” Aquí se refiere a él mismo con eso de “todos”, pero, ¿cómo pueden procesarle a él en lugar de a los políticos?
“No más Garzón, es lo que están pidiendo todo ese conjunto de medios que jalean desde la extrema derecha y desde la radicalidad y el fanatismo más absoluto”.
¿Se referirá el juez a “la extrema derecha y el fanatismo” de los medios de comunicación colombianos, los más importantes, que han puesto el grito en el cielo ante la oferta del Gobierno español de enviarlo allí como asesor? Han dicho “No Garzón”, antes siquiera de que el Gobierno colombiano abriera la boca. Y eso que era gratis, pues la oferta del Gobierno español incluía el pago de sus honorarios. Pero no lo han querido ni gratis. Debe de ser la rama colombiana de la conspiración contra Garzón. Convendría que Coixet le hiciera otra película, para que se enteren los colombianos, que no se enteran.
Jueces
