Presiento que voy demasiado deprisa para vosotros: no os habeis tragado aun lo de la boca y llego con otra cucharada. Asi son las cosas (este blog), para gente que corre con el calzado adecuado. Y dicha esta chuchainez, dire que me ha dejado entre templado y frio la pelicula de Oliver Stone, ‘World Trade Center’, lo que, dado el tema, no es desde luego un halago. Es una peli impresionante en unos sentidos, todos los que tienen que ver con la vista, pero algo desposeida en otros porque incurre en ese topico de manosear la verdad excesivamente hasta dejarla sin cascara y casi sin sabor. Aunque, insisto, es un pedazo de peli: vuelve, el tio, a levantar y a tirar las torres. Una proeza. Me ha hecho mas tilin la de Vehoeven, ‘Zwartboek’, un film belico lleno de todas las cosas buenas del genero y algunas novedades. Recomendable cuando llegue, que llegarà.
Algunas cosas volanderas de la Mostra: ha venido Valentino Rossi, pero yo voy en una bicicleta alquilada, con lo que no he podido seguirle el rebufo. Con una de esas bicis alquiladas, la de Antonio Gasset, pudimos asistir la otra noche a un espectaculo bochornoso, el que protagonizo el propio Gasset con Boyero sentado en la barra cuando se dieron un pequenio guarrazo sin lesiones… La velocidad era nula (se cree que incluso estaban parados), pero lograron paralizar durante unos minutos el trafico de la calle.
Desde luego, Scarlett Johansson esta mucho mejor asi, al natural, tal y como se presento ante la prensa; parece lo que es, una chiquilla, y no ese pedazo de mujerona fatal que le otorga una camara de cine. Tan impresionante o mas que ella aparecio Diane Lane, con un traje malva que lo reconciliaba a uno con ese color. No se puede ser ni mas guapa ni mas elegante.
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