Esta es exactamente la pregunta que se hacen en el Ministerio de Hacienda, tras anunciar el presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, que en 2014 bajará algunos impuestos. La mayor bajada de una Autonomía en toda la democracia y que supondrá para los madrileños un ahorro de 357 millones de euros.
Los técnicos de Hacienda han cogido la calculadora y no le salen las cuentas. No entienden que decidan bajar los impuestos, cuando, por otra parte, tienen que pedir un crédito de unos 300 millones de euros para hacer frente a las deudas pendientes. Si no tienen dinero ¿cómo es posible que renuncien a ingresar 357 millones? ¿Y por qué no acuden al Fondo de Liquidez Autonómico (FLA) para obtener esos 300 millones si el Gobierno les ofrece un tipo de interés más bajo que el mercado?
La conclusión a la que han llegado es que Ignacio González está haciendo política con esta arriesgada decisión. Un anuncio muy atractivo para los ciudadanos con el que busca tener un perfil propio frente a Esperanza Aguirre. A menos de dos años para las elecciones autonómicas, González tiene que trabajarse su candidatura para que el PP cuente con él para optar al Gobierno de Madrid. Nada mejor para ganar popularidad que llenar el bolsillo de los madrileños, aunque sea un poquito.
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