Metta World Peace no es un jugador más y Nueva York tampoco una ciudad común. Por eso, de su conjunción, no podía desprenderse la lógica y ha sido en el primer partido oficial como jugador de los Knicks cuando el alero ha dado la nota… y eso cuando aún quedaban unas horas para que comenzara el encuentro ante los Bucks.
Recién llegado a la Gran Manzana tras su paso por los Lakers, Metta World Peace salió con tiempo de casa para llegar al «trabajo». Un hábito normal en cada gran capital del mundo por cientos de miles de personas… pero que no lo es tanto cuando se trata de un jugador de la NBA. Los pasajeros del metro de Nueva York alucinaban con la escena. El nuevo jugador de los Knicks, esperando en el andén a que llegara su tren para ir al Madison Square Garden.
«¿Ey, tú eres Metta no?». Era tan extraña la situación, que alguno no daba crédito. El díscolo jugador de los Knicks optó por coger el metro para ir al partido y los pasajeros del metro de la Gran Manzana lo fliparon. Fotos, autógrafos, gritos de ánimo… si había alguien que aún tenía dudas, Metta se los ganó a todos. Ya es un «knickerbocker» más. «Let’s go Knicks».
